HISTORIADORES DE CHILE. LA Semper eris pauper, si pauper es, Emiliane: Non dantur opes nune, nisi divitibus. Si eres pobre y desdichado, Amigo Emiliano, es cierto Que lo has de ser sin acierto En tu miserable estado; Que solo al que está sobrado De ricos bienes y dones, Se los dan tan a montones Como está experimentado. yandan asento aal nouloy asoslay oug la Somcu Este es el trabajo y achaque lastimoso de nuestro desdichado siglo, que no se dan ya los premios honrosos ni de algunas conveniencias a los que los merecen, si son pobres, sino es a los que tienen de sobra lo que a los otros les falta; mas este stilo de gobierno se verifica en algunos ministros superiores, que olvidados de la obligacion que tienen, y en la que S. M. les ha puesto para el descargo de su real conciencia, se sujetan y postran los sentidos al desenfrenado apetito de la avara cudicia, que en estos lamentables siglos se ha señoreado de tal suerte, que en los mas levantados tribunales tiene puesta su silla y asiento en que preside, y son mui señalados los que a su poder y mando no le hincan la rodilla y le erijen altares; con que estan los consejos, algunos, mui a riesgo de hallarse en sus acuerdos algun Judas, por no alargarme a decir puede haber muchos. Y que se presuma entre tantos asistirle alguno, no tiene el mas atento que maravillarse, pues entre doce escojidos del Rei de cielos y tierra J. C. S. N. no faltó uno, y otros que se llevasen de sus propias conveniencias, y alguno que pareciese lisonjero. Y porque la prueba de lo dicho es algo dilatada, con algun moral conveniente la darémos en el siguiente capítulo con algunos lugares sagrados al intento.
CAPITULO XXIX.
En que se da la prueba ofrecida, y se saca que puede haber entre tantos consejeros algun Júdas, algunos ambiciosos y lisonjeros, y que es de grande utilidad la asistencia del superior y de la universal cabeza para que ande ajustado todo. coton of 10 De las acciones y ritos de estos bárbaros y soldados valerosos se han orijinado inexcusables los capítulos antecedentes, y hasta dar fin a la materia que nos pusieron en las manos, será forzoso suspender un rato nuestra historia, que es la que nos va abriendo camino para no errar el blanco a que lleva puesta la mira el principal asunto de este libro. e Pruebo con el texto sagrado lo que tengo propuesto y prometido. Judas ya es claro y manifiesto que por treinta dineros vendió a su Señor y a su Maestro, que ofreciéndoselos los fariseos, parece que desde entónces buscó ocasión a su propósito para ejecutar la venta: ya tenemos entre los escojidos del colejio de Cristo y de su consejo
