NUÑEZ DE PINEDA Y BAS CUÑAN. un so Tem 449 es en este reino, porque saben ser lisonjeros, revoltosos y usurpadores de haciendas ajenas, con las cuales saben y han sabido adquirir los oficios preeminentes de la milicia, perturbando los spíritus y entendimientos de los que cudiciosamente gobiernan; pues aun los mas ajustados príncipes tal vez se sujetan a las adulaciones, dádivas y dones que reciben; con que atropellan la justicia, y las leyes de razon las menosprecian. HATS O Seil ¿Quién mas justo que David? quién mas celador de la justicia, ni mas patrocinador de las leyes? Pues vamos al capítulo 16 del libro 2 de los Reyes, y hallarémos probado nuestro intento. Caminaba el -profeta rei por las faldas de un escabroso monte con su ejército, fatigado, triste y aun lloroso, huyendo del que contra él habia conspirado, Absalon su hijo traidor, patricida y mal atento, en cuya ocasion le salió al encuentro Siba, criado de Miphiboseth, con dos jumentos cargados de pan, vino, pasas, higos y otros bastimentos, para que sus soldados se refocilasen, y los que mas debilitados se hallasen, tomasen algun aliento. Preguntóle el rei por su señor, que por fin y muerte de Saul servia a Miphiboseth su nieto, y respondió que habia quedado en Jerusalem, diciendo que la familia y concurso del pueblo de Israel, le habia de restituir el reino de su padre. Oh! infiel y falso criado, ¿cómo vendes a tu señor? Cómo le levantas testimonio falso (de estos hallarémos un sin número en nuestros siglos, que aun no solamente venderán a sus señores por complacer a los que gobiernan y lisonjean, sino es tambien a sus padres)? Llegó el criado presentando dones, y adulando con palabras engañosas y finjidas, a la presencia del rei, y alcanzó lo que quiso fácilmente, pues le donaron todas las haciendas de Miphiboseth; sobre lo cual dijo Lira: siendo David santo y justo, en una cosa tamaña fué fácilmente engañado por los dones de este adulador insolente y por sus finjidas palabras, que sin examinarlas, ni escuchar a las partes, le donó la hacienda de su dueño; en que pecó gravemente, como lo sienten Lira, el maestro de las historias San Gerónimo, Hugo Cardeñal, Rabano, Dionisio, el Abulense, Cayetano y otros, segun el doctor y padre Francisco de Mendoza. Y lo peor y mas perjudicial de esta sentencia fué, que habiendo parecido Miphiboseth en la presencia del rei, y averiguado la maldad y traicion del criado, y la inocencia del amo, aun permaneció en la sentencia dada (caso digno de admiracion). Partid (dice) las posesiones entre vos y Siba; aquí parece que el rei se contradijo y faltó a la verdad por complacer y dar gusto al embustero adulador, porque si al principio dijo que donaba a Siba los bienes todos y las posesiones de Miphiboseth, ¿cómo dice ahora que partan los dos las heredades y haciendas? Aquí se hallan en los discursos algunas variedades, y yo me arrimo y sigo la opinion del gran doctor Francisco de Mendoza, que dice, que las dádivas y dones perturbaron el entendimiento al rei y le prevaricaron; tanto como esto puede la adulacion y los recebidos dones, aun en un justificado rei como David, y así no tenemos que maravillarnos de que este reino de Chille ca-
