literario, hasta que por fin en 1834 se decidió á publicar su Memoria descriptiva de Tucumán fruto de los apuntes que hizo en su viaje, tres años antes, y que es un cuadro de esa naturaleza tropical y frondosa, con todas las impresiones que le produjo, á través de los recuerdos, en su fantasía delicada y brillante.
La contestación al voto de América (1835), es una replica á Rivera Indarte, sobre nuestro entredicho con España y la necesidad de cambiar de política con respecto á esta nación.
Estudiando el derecho natural y positivo, desarrolla con claridad admirable, las teorías de la escuela histórica en su Fragmento preliminar al estudio del Derecho.
Con el concurso de Juan M. Gutiérrez, Tejedor, Vicente F. López y otros que le servían de colaboradores empezó á publicar «La Moda», (1834) periódico literario. En sus columnas se inició como crítico, firmando con el seudónimo de Figarillo una serie de artículos satíricos sobre las costumbres reinantes en esa época, y en los que se revela poseedor de un caudal de profunda observación, fina gracia y chiste mundano.
Perseguido por Rosas, se vio obligado á emigrar, pasando á Montevideo en agosto de 1838. Sin recursos, obligado á trabajar para vivir, llevaba por único capital su grande inteligencia.
Por este tiempo su gran labor fué el periodismo. Colaboró en «El Nacional», la mejor publicación que entonces había en el Río de la Plata, escribiendo también en «El Grito Argentino» y en el «Iniciador», periódicos sostenidos por la colonia argentina, emigrada en Montevideo.
En mayo de 1839 fundó con Miguel Cané «La Revista del Plata» proponiéndose con ella, uniformar opiniones en pro de la expedición que contra la tiranía de Rosas preparaba el general Lavalle.
Después de esto se dedicó á su profesión de abogado, aunque sin abandonar por eso el periodismo, pues además de colaborar en «El Talismán», fundado por Gutiérrez y Rivera Indarte, el mismo fundó «El Corsario» con el objeto de condensar en él, cuanto apareciese de notable en la literatura y en política en la prensa de Montevideo, y una vez desaparecido éste, escribió con Mitre «El Porvenir», semanario de idéntico género que los anteriores y como ellos también de escasa vida.
Para Alberdi, cada suceso nuevo era un fenómeno, ya de la ley histórica ó de los errores de los hombres, ya de las preocupaciones de las épocas. Este sentimiento que le era propio é ingénito, fué el que inspiró La Revolución de Mayo,