Página:De Madrid a Nápoles (1878).djvu/382

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
352
DE MADRID A NAPOLES

En cuanto a la ciudad de Módena, hállase cercada de fuertes niurallas. Nosotros hemos entrado en ella por la Puerta de Bolonia, en que principia el Corso della via Emilia, magnífico boulevard que atraviesa la poblacion de extremo á extremo. Este corso (ya lo dice su nombre) forma parte de la antigua Via Emiliana, construida por los emperadores romanos para poner en comunicacion á Roma con Ariminum (hoy Rímini), pasando por Pisa y Plasencia; y de aquí ha tornado el nombre de La Emilia toda la parte de Italia que se extiende entre el Po y el Apenino, desde la region oriental de la ex-Legacion de Bolonia hasta los límites del ex-Ducado de Plasencia.

Módena , por lo que hasta ahora he visto, es una hermosísima ciudad. Las calles, anchas, rectas, enlosadas, algunas con pórticos y todas profusamente alumbradas de gas, estaban hace poco, cuando yo pasé por ellas en busca del Albergo, inundadas de transeuntes, entre los que figuraban muchos soldados, muchos milicianos y algunos garibaldinos con camisas encarnadas. Todo el mundo hablaba alto, reia mucho, cantaba fuerte, miraba con arrogancia y andaba con ufanía... Innumerables organillos, violines y arpas tocaban en todas las calles (y tocan aún en este momento á la puerta de la Trattoria) los himnos patrióticos de que ya os he hablado varias veces. En los balcones on lean mil y mil banderas tricolores (blancas, encarnadas y verdes) con la Cruz de Saboya en medio. Las esquinas, las puertas, los carruajes públicos, los cristales de las tiendas, todo está lleno de tarjetones con Vivas á Victor Manuel.-No hay que dudarlo: Módena se halla ébria de gozo, loca de amor patrio, olvidada de sus pasados infortunios...

¡Oh! ¡si Francisco V viese en este instante á su antigua córte!

A propósito de Francisco V, voy á deciros (en tanto que es hora de ir al teatro) algunas de las cosas que me han contado varios patriotas de la ciudad, con quienes he comido en mesa redonda, y que empezaron por hacerme algunas preguntas sans-facon acerca de mis ideas, para concluir por explicarme familiarmente las suyas, y toda la historia de este lilliputiense reino. Quien conozca á los italianos, sepa lo que es un liberal triunfante y haya tenido que ver con la milicia nacional de cualquier país, no extrañará la improvisada y cordial franqueza que me han dispensado mis comensales...

El Ducado de Módena (comprendiendo en él el Estado de Massa Carrara, que le pertenecia últimamente) tenia diez y ocho leguas españolas de máxima longitud, por unas diez y seis y media de anchura. Su poblacion se calculaba hace dos años en 600,000 almas, de las que sólo encerraba la capital unas 32,000. La religion del Estado era la católica; pero se toleraban las demás, contán lose en el Ducado 200 protestantes y 2,700 judíos.-El ejército, en tiempo de paz, constaba de 3,500 hombres.-El presupuesto de gastos ascendia á 36.000,000 de reales.- La vid, la seda y la explotacion de los célebres mármoles de Carrara eran (y