— Entonces, ochenta y cinco.
— ¡No tanto, demonio! Tengo cincuenta y tres y medio.
— Eso no es mucho...
Carlos trataba de llamar la atención de Flora de Lis, hablándola de Liliana en términos pomposos y funambulescos:
— Es una actriz de genio; ¿no la conoces? ¡La Muñeca!... Una gran actriz, una mujer extraordinaria, lo más raro, lo más original de nuestro siglo... Figúrate que Virgilio y el Dante se batieron á muerte por ella... Ahora acaba de pasar tres semanas en San Petersburgo, y eso ha bastado para que dos tíos de Pedro el Grande se vuelvan locos de remate. El emperador tuvo que desterrarla para evitar una revolución en su palacio, porque los rusos querían proclamarla emperatriz de la India. Tú, que eres ilustrada, debes de conocer los sonetos de Mirbeau titulados «Clara Terpe»... son unos sonetos en prosa, pero siempre son sonetos; ¿no te parece?... Pues