Página:Diez años de destierro (1919).pdf/17

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
15
 

CAPITULO II

Comienzos de la oposición en el Tribunado. Primeras persecuciones con este motivo.—Fouché.

Algunos tribunos querían formar en su asamblea una oposición análoga a la de Inglaterra, y tomar en serio la Constitución, como si los derechos que al parecer garantizaba tuviesen alguna realidad, y como si la aparente separación de los cuerpos del Estado fuese algo más que una mera fórmula de etiqueta, una distinción entre las diversas antecámaras del Cónsul, en las que se admitía a unos cuantos funcionarios. Confieso que recibía con gusto al corto número de tribunos que se negaban a emular la complacencia de los consejeros de Estado, y pensaba que, sobre todo los que en años anteriores se habían dejado arrastrar demasiado lejos por su amor a la República, tenían el deber de ser fieles a su antigua opinión, ya que había pasado a ser la más débil y amenazada.

Uno de esos tribunas, amigo de la libertad, y dotado de uno de los entendimientos más notables que la naturaleza haya otorgado jamás a hombre alguno, Benjamín Constant, me consultó acerca del discurso que se proponía hacer, denunciando la aurora de la tiranía; le animé a ello con toda la fuerza de mis convicciones. Sin embargo, como se sabía que era de mis íntimos amigos, no pudo por menos de temer lo que por ese motivo podía sucederme. Mi lado flaco era mi afición a la vida de