para una reforma de la ley electoral y para el proyecto sobre Comuna Autónoma de que era autor el jefe conservador de Manuel José Irarrazabal. En definitiva, no se llegó a acuerdo.
En Agosto de 1890 la situación era extremadamente grave. Se hablaba de una acusación al Ministerio e, incluso de declarar vacante el cargo de Presidente de la República. Con la intervención del Arzobispo de Santiago y de don Alvaro Covarrubias logró obtenerse una solución y se organizó un nuevo Gabinete en el que, por primera vez durante la Administración Balmaceda figuraba un conservador. El Gabinete estaba presidido por don Belisario Prats y el Ministro conservador era don José Tocornal, titular de la cartera de Relaciones Exteriores. No alcanzó a durar dos meses este Gabinete y fué reemplazado por otro de liberales, presidido por don Claudio Vicuña.
Desde este momento, no volvió el Partido Conservador a participar en el Gobierno de Balmaceda. Por el contrario, cada vez más fué orientando su actitud hacia una decidida oposición. Un comité secreto encabezado por don José Besa, Presidente del Partido Nacional, era integrado también por los líderes conservadores don Manuel José Irarrazabal y don Carlos Walker Martínez; y por el liberal Eduardo Matte.
Los acontecimientos políticos se fueron desarrollando vertiginosamente, hasta llegar a la sublevación de la Escuadra, al Acta de deposición del Presidente Balmaceda y al triunfo de la Revolución en 1891. El Partido Conservador mantuvo firmemente su actitud opositora, interviniendo en todos las actuaciones que terminaron con la derrota de Balmaceda. Sus parlamentarios firmaron el acta de deposición del Presidente; muchos de sus dirigentes y militantes formaron filas en el ejército revolucionario.
Mientras tanto, se habían realizado en el país dos elecciones parlamentarias. En las elecciones ordinarias de 1888, el Partido Conservador obtuvo 14 diputados y un Conservador. En las elecciones de Congreso Constituyente realizadas en Marzo de 1891, sólo resultaron elegidos parlamentarios adictos al Gobierno. El Partido Conservador no obtuvo representación. Con el triunfo de la Revolución de 1891, la situación política del Partido habría de varias considerablemente. Su historiador Juán Diaz Salas, dice lo siguiente. "Triunfante la oposición en los campos de batalla, quien iba a recibir los laureles del triunfo