Página:ECH 2840 4 - Liberal Democrático, Partido (Balmacedista).djvu/4

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada

A raiz de la Convención de Talca fué designado Presidente del Partido Liberal Democrático, don Enrique Salvador Sanfuentes. El señor Sanfuentes había sido amigo personal del Presidente Balmaceda y Ministro suyo en varias ocasiones. Figuró como candidato oficial a la Presidencia de la República y hubo de renunciar a dicha postulación por la agitación política que ella acarreó, siendo reemplazado en ella par don Claudio Vicuña. Más tarde se alejó de Balmaceda y aunque éste lo llamó, se excusó de volver. ¿No piensa Ud. venir? le había escrito el Presidente con fecha 6 de Abril de 1891; y había contestado: "Desgraciadamente, hombres y convicciones me alejaron de Ud... Mis convicciones son inalterables". Naturalmente estas circunstancias contribuyeron a que la designación del señor Sanfuentes no constituyera un vínculo de unión entre los balmacedistas y que fuera su designación resistida por algunos sectores. Sin embargo, logró imponerse y Sanfuentes fué por muchos años la cabeza del movimiento balmacedista.

Organizado ya el nuevo Partido Liberal Democrático, se dió a la tarea de acrecentar sus filas y prepararse para las elecciones parlamentarias que habrían de realizarse en 1894. Se formaron diversos Directorios Departamentales; se fundaran nuevos diarios y periódicos en todo al país; y se hizo activa divulgación de sus principios. Las candidaturas a diputados y senadores fueron presentados en todo el territorio nacional y los trabajos electorales se desarrollaron intensamente. A sólo tres años de la Revolución que había derrocado al balmacedismo y con la animadversión del Gobierno, la lucha que el Partido se proponía era indudablemente muy dura; pero el entusiasmo de los militantes y la afección hacia el Presidente Balmaceda, cuya memoria se quería reivindicar, superaron a los factores adversos.

El Gobierno, que encabezaba como Presidente de la República don Jorge Montt, se sintió naturalmente alarmado ante las proporciones que adquiría el nuevo movimiento. Como se realizaran algunas tentativas de perturbación del orden público e incluso hubiera un ataque, simulado o verdadero al Cuartel de Artillería de Santiago, el Ministro del Interior don Pedro Montt decretó el estada de sitio y relegó a Copiapó al Presidente del Partido Liberal Democrático don Enrique Salvador Sanfuentes y a la mayoría de los miembros del Directorio General. Como esto ocurría en vísperas de las elecciones, el Partido debía afrontar tales comicios sin sus cabezas dirigentes.