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edificar tantas fábricas: la Iglesia de Toledo no ha tenido en tiempo alguno Obispo más edificante en todos conceptos.

Por lo demás, y ya que la ocasión es oportuna, reconozcamos que es más noble y fecundo el afán de edificar que el de destruir. En aquel siglo de atraso, Cisneros regeneraba á Alcalá y la convertia en tabernáculo de la ciencia. La piqueta revolucionaria del siglo XIX ha barrido aquel santuario, y en su lugar tal vez existen hoy cuadras para nuestros corceles de guerra, sin que el espíritu liberal, al cual, por otra parte, tanto debe la pátria, haya creado nada para compensar á las clases pobres y desvalidas de la pérdida que han sufrido, pues ya no encuentran en otras universidades aquella protección y aquella ayuda que les servia para ascender en nivel social por medio de su constancia y aplicación.


XLIX.

Era Rector de la Universidad el Rector del Colegio de San Ildefonso, quien para el despacho ordinario de los negocios estaba asistido por tres Consejeros, consultándose los casos graves con todo el claustro de Profesores y aun con los discípulos. Los Reyes y los Papas invistieron de gran autoridad al Rector, de suerte que, en cierto modo, ejercía hasta jurisdicción criminal para juzgar de las faltas cometidas por personas que dependían de la Universidad. Tenia también su Canciller, como la de Paris, para conferir los grados académicos, formar parte de los tribunales de exámen y asistir á todos los ejercicios científicos.

Fué primer Rector D. Pedro Campo, Profesor de Salamanca, y primer Canciller D. Pedro Lerma, que lo era de Paris, cuyas dos universidades, que eran entonces las más célebres del mundo, proveyeron de sabios é ilustres Profesores á la de Alcalá.

Abrió sus cursos el nuevo santuario de la ciencia en 18 de Octubre de 1508, y tenia cuarenta y dos cátedras: seis de Teología, seis de Derecho Canónico, cuatro de Medicina, una de Anatomía, una de Cirugía, ocho de Filosofía, una de Filosofía Moral, una de Matemáticas, cuatro de Griego y Hebreo, cuatro de Retórica y seis de Gramática.

Los Profesores ejercían sus funciones sólo por cuatro años,