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EL LIBRO DE LOS CUENTOS. — 121

un delito tan grande? Y sin embargo, no hacen mas que ahorcarlo.

—Ahí verá V.


Adivinanzas.

29 — Quién es el primero que hace hervir la olla por la mañana en Madrid?

30 —¿Qué es lo que llevaba Alejandro Magno en la mano izquierda cuando tomó la ciudad de Larapsaco?

31 — ¿Por qué los de Madrid nos vamos á la cama?

32 — ¿Quién es aquel que lleva continuamente corona, barbas largas y espuelas?


La vieja á caballo sobre un cerdo.

Una honrada familia tenia prohibido salir de casa á una pobre vieja, que sin otro delito que el ser estrepitosamente fea, era la burla de los chiquillos, sin que por eso dejasen de tenerla en olor de bruja en todo el pueblo.

Aconteció que se celebraba anualmente una mascarada, á la que ningún vecino faltaba, si se esceptúan los enfermos, y aun estos eran acercados y sacaban la cabeza por la ventana de su casa para mirarla.

La infeliz anciana, no atreviéndose á enseñar la geta por la suya, después de reflexionar un buen rato sobre el modo de ver la fiesta sin ser vista, determinó bajarse al portal, y entreabriendo la puerta de la casa lo suficiente para colocar un ojo, se dio por contenta, ya que no le era posible satisfacer de otra manera sus buenos deseos.

Pero la desgracia, que siempre persigue á los débiles, hizo que un soberbio cerdo de colosales dimensiones, y que á la sazón estaba buscando por el patio lo que no le hablan dado en todo el dia, resolviese salir á la calle en el momento en que por