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significa la preciosa piedra del sufrimiento y la abne gación. »La esmeralda era una piedra tan sagrada enlre los israelitas, como entre los indios americanos : la piedra de los sellos que llevaban pendientes de sus brazos los pontífices de ambas naciones, y en su grande anillo del dedo índice de la mano derecba era una esmeralda. «El celo supersticioso de los primeros misioneros,

destruyó muchos preciosos objetos tallad is en esme raldas, piedras consagradas á Votan: pues fueron redu cidos á polvo que se dispersó á los cuatro vientos como restos de execrables ritos paganos. «Los antiguos americanos del Sur, entre otras ofren das , llevaban á su deidad oro, plata, joyas, perlas y | otras cosas preciosas, lo cual era también costumbre i entre los bebreos. (Exodo, XXXV).

• Los conquistadores asirios, que saquearon el ten pío de Salomón , bailaron en él un inmenso botin en joyas y vasos de oro y. plata. • Los templos de Méjico y del Perú, especialmente el" de Verachocha-Pachacamac en Cuzco, ofrecieron igual j cebo á los devastad ires soldados de Pizarro íSe eonltnnnrá. J F. t V

Nicolás, arzobispo de Myra, según la profecía que se dice qire hizo , al pasar por esta ciudad en su peregri nación á Roma, de que allí descansarían sus huesos. La iglesia del Sepulcro, ó Basílica antigua, sobre la cual se edificó otra suntuosa, llamada la Iglesia Alta, con siste en una lirga nave, cuya bóveda es'á sostenida por tres filas de columnas con capiteles de distintos órdenes. En el centro y sobre el sepulcro del Santo, rodeado de una verja, se halla el altar dedicado á su memoria, que es de plata maciza y en sus cuatro lados, están representados en relieve los argumentos de sus milagros mas famosos. En el altar hay una abertura

para que los fieles puedan ver el santo cuerpo. Sobre dicho altar se halla la estatua que le representa con sus ornamentos episcopales, también de plata maciza y perfectamente dorada , mientras que su verdadero re trato, dádiva del Czar de Servia, Urosch, se guarda con otras reliquias en la tesorería de la iglesia. Este templo es además famoso por haber predicado en él en 1098 Pedro de Amiens, escitando a los cris tianos á la primera cruzada. Allí también consagró Bohemundo de Tarento las armas de los guerreros que le ayudaron á conquistar la Antioquía, y allí, finalmen te, se celebró por ciento ochenta y cinco obispos, la-

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LA CRIPTA (EL SEPULCRO) l. LA IGLfSIA DE SAN NICOLÁ* , K> BARI. Pocos santos lian tenido un culto mas generalmente extendido en las naciones de Europa que el glorioso San Nicolás de Bari, nombre que se encuentra en todos los martirologios y desde el siglo IX en todos los calendarios de la cristiandad, asi como en las monedas y sellos de varias ciudades. Nuestro grabado representa el sepulcro y el altar construidos en el siglo XI, en Bari, al glorioso San