Amir y Arasi 61
CAPÍTULO XI
El frío de la desesperación no se iguala muchas veces, al frío de la muerte, porque la comparación no cabe. ¡Oh! es que hay dolores que desgarran las entrañas y deshilvanan una á una, las fibras del corazón !
La situación de doña Jova y su hijo, es tristísima ; después de pasados los primeros momentos de llanto y dolor; después que han podido esclarecerse á medias las ideas de los desgraciados deudos, y am- bos. unidos en un brazo se inclinan al peso de la desgracia sin que una lágrima brille en sus pesta- ñas. no pueden aún meditar con perfecto eselareci- miento sobre lo erítico de su situación. Los pensa- mientos forman una amalgama desigual entre el convencimiento y la duda pero ¡ay! con cuánta mayor presteza. con qué rápido desenvolvimiento Mega á la mente la idea de lo que es la nada, cuando nada tenemos y todo lo teníamos antes. Acaso la realidad siempre es amarga; acaso sólo la imagi- nación nos hace felices: soñar, es ganar el cielo; despertar. es descender del paraíso. ¡Ay! ¡vivir, vivir!...
Muchas veces nos hacemos y seguiremos hacién- donos esta pregunta: ¿qué es vivir?...
¡Vivir es crucificar el alma; vivir... quizá, quizá, vivir es morir, en el vocabulario de los ángeles!
Vivir, es: sufrimiento, pesar, inquietud, eongoja...
Vivir es conservar la materia ¡es envolver lo purí- simo en lo abyecto!