De regreso al Ejército del Norte, se le hizo sargento mayor graduado con techa 28 de junio, y un mes más tarde recibió la efectividad en el mismo.
Teniente coronel del regimiento N° 3 de caballería de línea el 1° de abril de 1829, el 24 de mayo siguiente ascendió a coronel graduado, obteniendo la efectividad el 28 de julio del 31.
Al frente de su unidad defendió la villa de Melo contra el coronel argentino Olazabal, revolucionario lavallejista. Obligado por la superioridad numérica del enemigo hubo que rendir la plaza después de cuatro días de lucha. (Febrero de 1833).
Secretario de la Comandancia General de Campaña desde diciembre de 1834, con retención del mando del 3.er escuadrón, cesó en este último cargo en julio del 35, permaneciendo como secretario de la Comandancia hasta febrero del 36, fecha en que hizo dejación del puesto.
A las órdenes de Rivera participó en la llamada revolución constitucional, y entablada la lucha contra el tirano de Buenos Aires, se le encargó la organización de las Milicias de Extramuros el 17 de noviembre de 1840. En enero de 1842 pasaba a la Comisaría General de Guerra del Ejército, con retención del cargo anterior, para ser nombrado en julio del mismo año 42, Comandante General de Armas de la capital, cargo que desempeñó hasta el 3 de febrero de 1843.
Secretario de Rivera, general en jefe del ejército de operaciones, el 13 de octubre de 1846, retuvo su importante puesto hasta el 27 de marzo del 47.
Al finalizar la Guerra Grande era otra vez Comisario General de Guerra y mantuvo ese destino hasta el año 1852.
Acompañó al general Flores en la revolución amada “Cruzada Libertadora” a partir de noviembre de 1863, siendo por ese motivo borrado de las listas, como traidor, por el gobierno de Berro. Flores, ya en camino del triunfo, le confió la Comandancia Militar de Colonia en enero de 1865.
Coronel mayor (general) el 17 de junio de 1868, contando 43 años de servicios, el 3 de noviembre de 1869 el presidente general Lorenzo Batlle lo llamó a formar parte del gabinete en la secretaría de Guerra y Marina, sustituyendo al general Juan Pablo Rebollo.
El momento político era difícil por la actitud de opositor que había asumido el general Francisco Caraballo y se necesitaba un candidato que, como el veterano Posolo, contemplara las suspicacias de aquél, Permaneció en el ministerio hasta el 20 de agosto del año siguiente, fecha en que vino a sustituirlo el coronel Trifón Ordóñez.
Alcanzó a vivir todavía muchos años en robusta ancianidad, falleciendo en Montevideo la mañana del 7 de setiembre de 1882.
