Página:Fernández Saldaña - Diccionario Uruguayo de Biografías (1810-1940).djvu/476

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida

Piedras, y de Ayudante de Campo.

El 12 de marzo de 1812 pasó a ser capellán del Regimiento de Blandengues de la Frontera de Montevideo, cargo que desempeñó gratuitamente cediendo su sueldo íntegro para “las urgencias de la patria”.

Compañero y asistente de nuestra gente en los días del Éxodo, demostró el párroco de Florida “que sabía ser párroco sin dejar de ser ciudadano y respetar los derechos de la patria a la par de los augustos derechos de la religión”.

Presente en el sitio de Montevideo, hallóse en la batalla victoriosa del Cerrito.

Sin embargo, el lamentable cisma surgido entre Artigas y las autoridades porteñas, originó un distanciamiento tan hondo entre Figueredo y el Jefe de los Orientales, que éste llegó a exigir entre las condiciones de arreglo propuestas a Buenos Aires “el retiro del presbítero o Vicario General del Ejército don Santiago Figueredo”. Esta exigencia, sostenida con energía, tuvo cumplimiento pleno cuando la autoridad directorial porteña caducó a raíz del golpe militar del 21 de febrero de 1813.

Desde entonces, la actuación de Figueredo en la historia de su provincia nativa, no cuenta más. Pasa a desarrollarse en la otra banda del río y allí fué Teniente Vicario del Ejército del Alto Perú, en 1814, miembro de la Asamblea General Constituyente de las Provincias Unidas, Canónigo de la Catedral de Buenos Aires en 1818, dignidad del Senado Eclesiástico en 1820 y finalmente — el 23 de agosto de 1830 — elegido Rector de la Universidad de aquella capital.

Conforme dice Ariosto Fernández, biógrafo del conceptuado sacerdote, cuyos escritos han sido esenciales en la redacción de esta síntesis, Figueredo había proyectado un viaje a la patria, donde se proponía plantear y delinear la Villa del Rosario, cuando una repentina reagravación de las dolencias que le aquejaban de tiempo atrás, concluyó con su vida el 22 de febrero de 1832,


FIRPI, ANGEL

Industrial italiano, figura tan conspícua como curiosa de la época de gobierno de Máximo Santos, contante entre el grupo de los amigos más allegados al Presidente y Capitán General de la República.

Hombre del pueblo y de pocas letras, natural de Torrini, Pavía, después de haber luchado en 1859 a órdenes de Garibaldi en el cuerpo de Cazadores de los Alpes y ser gravemente herido en San Fermo, hizo proa al Uruguay para trabajar en su oficio de panadero.

La nave que lo conducía naufragó en el Banco Inglés, pero ésto, que podía creerse signo de mal augurio, no tuvo influencia alguna en la vida del emigrante.

Establecido en Montevideo, halló ocasión de favorecer a Máximo San-

— 476 —