años desempeñó funciones de vocal secretario del Consejo de Higiene Pública, en cuyo carácter el gobierno lo envió a Europa en misión de estudio de las obras de salubridad y dió cuenta de ella en un largo y documentado informe.
Sin residir en el país, pero visitándolo año a año y manteniendo relación estrecha con los uruguayos y la vida nacional, nacionalista militante, siguió la marcha de nuestra política y formó en todos los comités y juntas revolucionarias Organizados en la Argentina. Alguna vez los llegó a presidir y en su sostenimiento y en trabajos políticos gastó mucho ce lo que acaso pudo ahorrar.
En recompensa moral de estos servicios al partido, sus correligionarios lo proclamaron candidato a la Presidencia de la República y lo votaron para tan alto cargo en la elección del 1° de marzo de 1919. La victoria del candidato colorado, doctor Baltasar Brum, estaba sin embargo descontada, y el doctor Golfarini tuvo el buen tino de declarar que solo en la inteligencia de un triunfo imposible y en cuanto reflejaba en su honor accedía a aquella proclamación — que si fuera a tener visos de éxito habría rehusado — “pues ni sus años ni su alejamiento del país le permitían pensar en ser Presidente de la República”.
Un año más tarde, su noble antagonista del 1° de marzo le confirió el cargo de Médico Mayor Honorario del Ejército de la República, asimilado a general de brigada, El Dr. Golfarini vino a Montevideo en el mes de octubre y en una emotiva ceremonia que tuvo lugar en el Hospital Militar Central, el presidente Brum le ciñó el fagín blanco y celeste de general uruguayo.
Con este motivo, el viejo emigrado, amigo de todos los compatriotas, fué objeto de numerosos y sentidos agasajos, tras los cuales regresó a su modesto retiro de Buenos Aires, donde tenía grado de coronel como médico militar jubilado.
Admirable per su lúcida inteligencia y su robustez física, conservados hasta la víspera de su muerte, el Dr. Golfarini fué un “ causseur” entretenidísimo, cuya excelente memoria se complementaba con un espíritu irónico y lleno de leves causticidades.
Fundador del Club Oriental de Buenos Aires, había ejercido en varios periodos la presidencia de dicha sociedad.
Falleció en la capital argentina el 18 de agosto de 1925, rodeado de la consideración y de la estima de todos los que pudieron conocerle.
GOMENSORO, TOMÁS José del Carmen
Presidente de la República en carácter de presidente del Senado en ejercicio del Poder Ejecutivo, legislador y hombre político. Nacido en el pueblo de Dolores, departamento de Soriano, el 27 de enero de 1810.
En la Guerra Grande desempeña-
