blioteca Fernández Saldaña. En 1870 sacó a luz en Montevideo un semanario de caricaturas, “El Garrote”, el cual, después del cuarto número — visto su fracaso seguro— fusionó con otro de la misma índole, “La Ortiga”, que venía publicándose desde tiempo atrás. Director de “El Pueblo”, periódico de la Villa de Durazno en 1878, en sus últimos años de Montevideo embarcóse en la publicación por entregas de poesías latino-americanas compiladas por él y la cual comprendía varios tomos.
Únicamente legó a publicarse el primero en 1880, con producciones de Acuña de Figueroa, Juan Cruz Varela y Gertrudis Gómez de Avellaneda, acompañadas de sendas biografías y con retratos bastante correctos litografiados por Ligi,
El fallecimiento de Gordon, ocurrido el 24 de diciembre de 1881, interrumpió la realización de un pensamiento que estando a sus mismas palabras, acariciaba de ruchos años.
GOYENA, PABLO José
Militar de la independencia. Nacido en Buenos Aires el 30 de junio de 1812, recibió en la Escuela Normal dirigida por Juan Thompson los elementales pero sólidos principios de instrucción que alguna vez debían de valerle en la vida, pues no frecuentó mucho las clases, enrolándose a los trece años en el ejército que marchaba a la guerra de las Provincias Unidas contra el Imperio del Brasil, en calidad de porta estandarte del regimiento de artillería comandado por Tomás Iriarte.
Asistió a la batalla de Ituzaingó en clase de alférez de la primera compañía cuyo capitán era Martiniano Chivalert, ganando el escudo y cordones que se otorgaron a los vencedores, y hallóse también en la jornada de Camacuá, el 23 de abril de 1827.
Ascendido a teniente 2° el 22 de octubre del mismo año, el 17 de setiembre del 28 llegaba a teniente 1°.
Teniéndose presentes su comportamiento y valor se le hizo ayudante mayor del regimiento y luego de celebrada la paz regresó con el ejército a Buenos Aires,
En la patria tomó partido por la misma causa que defendía el general José María Paz y distinguióse en la defensa de Córdoba contra Quiroga.
La mala fortuna de Lavalle en Puente de Márquez lo obligó a emigrar al Salto Oriental en 1830 y residiendo allí, cuando el revolucionario lavallejista Mariano Paredes atacó la población, el capitán Goyena, conjuntamente con el juez de paz Juan Gualberto Palacios, organizó la resistencia del vecindario, obligando al caudillejo anarquista a retirarse a Paysandú.
Trasladado del Salto a Montevideo y como continuase fuera de servicio militar, aceptó el puesto de preceptor de la Escuela Pública de Minas para cooperar en las primeras
