año siguiente el Consejo Universitario le confirió la regencia del aula de derecho constitucional, cátedra que debía ocupar con brillantez y competencia singulares durante largos años, sin más solución de continuidad que la determinada por un decreto del gobierno de Santos en 1884, cuando el conflicto con el catedrático de Historia, profesor Desteffanis.
Excelente expositor, que conocía a fondo el vasto campo especializado en que fué verdadero maestro, el recuerdo de sus lecciones perduró entre sus discípulos unido a la viveza de los comentarios con que normalmente salpimentaba sus disertaciones.
Singularizó Aréchaga su carrera de docente por obra propia, autor de dos libros clásicos en nuestra Facultad, titulados “La Libertad Política” (1883) y “El Poder Legislativo”, de los cuales se han hecho varias ediciones.
En la presidencia de Idiarte Borda vino a la cámara como diputado nacionalista por el departamento de Flores en las elecciones de 1896, acto comicial cuya legalidad fué desconocida por sus correligionarios, que se alzaron en armas. A raíz de la muerte del Presidente y de la Paz de Setiembre de 1897 que puso fin a la revolución, Juan L, Cuestas, presidente del senado en ejercicio del Poder Ejecutivo, disolvió las cámaras merced al golpe de Estado del 10 de febrero de 1898, pero Aréchaga, que apoyaba la situación dictatorial, ingresó en el Consejo de Estado instituido por el gobernante de facto como cuerpo legislador, correspondiéndole el número treinta o sea el último, en la lista de los cargos reservados al Partido Nacional.
En el acuerdo electoral, ficción eleccionaria acordada entre las fracciones gubernistas, le fué adjudicada la senaturía de Flores, cuya banca ocupó por el período legal de los años 1899 - 01.
La bibliografía del Dr. Jiménez de Aréchaga no se circunscribe a las dos obras mencionadas más arriba, integrada como está por otros títulos, entre los que corresponde citar tales como “Cuestiones de legislación política y constitucional” (1899), “Discursos parlamentarios”, etc.
Redactor - fundador de la Revista del Plata en 1882, dispersó en distintas publicaciones facultativas una serie de estudios sueltos y artículos de verdadero interés,
Falleció en Montevideo en 1904.
JOUVE, JUAN Agustín Camilo
Francés, natural de Mersella, establecido en Montevideo en los días de la emancipación, anunciándose como ensayador, grabador en metales y maestro armero.
Unico o casi único en su especialidad, fué Jouve quién trabajó el primer gran sello de armas de la República, abierto en blanco, así como los de igual clase para los papeles sellados de 1830, 32 y 33,
