cible cansancio, vela junto a Gualterio, agoni- zante de fatiga, y quisiera para sí la muerte de su mano antes que presenciar su ruina y su afrenta por obra de los perseguidores. La pura doncella se recoge con su prometido a su patria, en la que una vida larga y dichosa premia su amor devoto y su fidelidad.
Objetivo y naturaleza de la poesía cortesana. Más conocida es la poesía cortesana con su ado- ración y aun divinización de la mujer. La poesía cortesana representa un nuevo ideario y una nue- va cultura, que surgen, casi súbitamente, coinci- diendo con las Cruzadas y el momento en que se distinguen la alta y la baja Edad Media, al des- pertar la cultura laica, cuando se contraponen el ascetismo y los goces vitales, el amor a Dios y el amor a las mujeres. Esta corriente, propagada por los trovadores y cantores del amor y no por los clérigos, como hasta entonces, se aproxima mucho, en sus anhelos de alegría profana, a nues- tra sensibilidad moderna. La mujer constituye el punto céntrico de la nueva sociedad.
¿A quién cantan los trovadores? Nuestra lírica más íntima celebra a la prometida, a la esposa, y canta los $oces familiares. El juglar cortesano no hablaba casi nunca de su propia mujer. El amor que ensalza está muy lejos del que encuentra en su hogar. El amor que cantan el Dante y sus contemporáneos excluye el matrimonio propia-
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