son las condiciones de su carácter; ellos son principalmente los que, saliendo de sus aduares, infestan los estados fronterizos, destruyendo, matando, é impidiendo el desarrollo de los ricos elementos de aquellos pueblos.
Los demás indígenas, más ó menos civilizados, moran entre las otras razas, dedicándose á la agricultura, á los tejidos de algodón, en lo que sobresalen principalmente las indias de Veracruz y Oaxaca, fabricación de cestos, de loza ordinaria, sombreros, mantequilla, quesos y otros muchos artículos que venden en las grandes poblaciones ó en sus mercados, que llaman tianguis, á los que concurren en gran número, con sus vistosos y, á veces, elegantes trajes, contrastando por su aseo con otros indios de la mesa central, generalmente degenerados.
Los indígenas, ejercen los actos religiosos que les impuso la conquista, propendiendo siempre á la idolatría y observando en muchos lugares, la práctica simulada de sus antiguas ceremonias, bajo la salvaguardia de la pública manifestación de su nuevo culto.
Los bailes pantomímicos, son la expresión más general y característica de sus regocijos; ya son en la frontera, las danzas salvajes, ya en los márgenes de los ríos, alegres é inocentes bailes campestres; ora son en las feraces regiones de las sierras, las danzas imitativas