الزنبوجة az-zembucha que se encuentra en P. de Alcalá y en R. Martín, así como la valenciana del colectivo الزنبوج az-zenbuch que se halla en Aben Loyon, en Aben Buclarix y en Aben Alchazzár. Considerando acaso Dozy que el vocablo acebuche no se encuentra en el árabe oriental sino una sola vez, según nos dice Freytag (Léx. II, p. 257), lo deriva del berberisco ثزنبوجت tsazambucht sin reparar en que esta dicción nunca pudo producir las formas arábigas ni las españolas. Con mejor acuerdo, mi docto amigo el Dr. Simonet le hace venir del adj. lat. acerbus, por el sabor amargo del fruto y la aspereza de su madera. Abona su opinión el hecho de encontrarse en el Idrisi (Geografía, p. 206 del texto ár. y 254 de la trad. francesa) el vocablo, الزنبجار az-zembuchár, acebuchár ó acebuchál, como nombre de un lugar entre Sevilla y Córdoba. Acaso el Acebuchar, aldea situada en los confines de la diócesis de Jaen. En los autores españoles de la Edad-Media es también frecuente este vocablo en sentido de bosque ó terreno poblado de acebuches. Léese en el Libro de Montería del Rey D. Alonso, cap. XXXI (Bibl. Venatoria, t. II, p. 296): «El acebuchar, que es entre Alcántara et Estorninos, es buen monte de puerco en invierno et en verano.» Y no desvirtúa ciertamente el origen asignado por aquél distinguido orientalista á nuestro vocablo acebuche la circunstancia de hallarse en el diccionario arábigo oriental del Camus la voz الزعبج az-zabach en el sentido de olivo, زيتون porque el autor de dicha obra floreció á fines del siglo XIV y comienzos del XV y, á no dudar, debió tomarla de autores nacidos en nuestra península. En efecto, dos escritores españoles, Aben Albeitar y Aben Loyon traen aquel vocablo, no en la acepción de olivo, sino en la de acebuchina ó fruto del olivo silvestre ó acebuche, como se lee en una nota marginal del Poema sobre agricultura de este último, fol. 14 v.: زيتوذة الزعبج الزيتون معرفة والجبلى منه الزذبوج ويسمى; A mi parecer este nombre azabach dado al fruto del acebuche, formado acaso del árabe persa; زبج aza-
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