Página:Historia de Cristóbal Colon y de sus viajes - Tomo I (1858).djvu/341

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
—261—

esperanza; sus rencorosos celos le ocasionaron una fiebre, de la cual murió al poco tiempo. Hombre de mar con- sumado, habria podido el señor Martin Alonso conser- var un puesto glorioso al lado de Colon, y asociar su nombre al hecho inmortal del descubrimiento, si, para emplear las mismas palabras del almirante, hubiera com- prendido la Jwnrá^ que le hacia con llevarlo á su lado. Por querer ser el primero, cuando no estaba destinado sino á ser el segundo, perdió el fruto de sus trabajos, la recompensa de los peligros que arrostró, y hasta lo que poseia antes de su partida: la felicidad y la consi- deración; y acortó su vida, manchándola antes con la deserción, la insubordinación, la violencia, la impostura y el fraude.


III.


Con la rapidez de una comunicación eléctrica llegó hasta los confines de España la noticia del prodijioso acontecimiento, que se celebraba en Palos, en Sevilla y en Barcelona. Y como el itinerario de Colon á la corte era atravesando por las mas populosas y florecientes pro- vincias, iba agolpándose á su paso un inmenso jentio de Murcia, Valencia, Aragón, Castilla y hasta de las mas escondidas aldeas. '^Resonaron los caminos y los campos con los vítores de los pueblos, que dejaban todo de la mano para verlo, y salirle al encuentro. Fué su viaje una verdadera marcha triunfal.^ El tropel que ocasio- . "JN"o mirando la honra quel almirante les Labia lieclio y da- do, &c". Martes 8 de Enero.

. Charlevoix. Historia de Santo Domingo, lib. II. p. 107.