Página:Historias extraordinarias (1871).djvu/290

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
286
EDGAR POE.

no pensé más que en salvarme. El globo se aplastó primero, despues se estiró con furia, luego comenzó á dar vueltas con una rapidez vertiginosa, y finalmente tambaleándose y revolviéndose, como un hombre borracho, me arrojó por encima del borde de la barquilla, dejándome á una altura espantosa, enganchado y cabeza abajo, de la punta de una cuerda muy delgada de tres piés de larga, casualmente pendiente al través de una hendidura del fondo de la cesta, y que providencialmente hubo de enredárseme al pié izquierdo cuando caf. Es imposible, de abso- Iuta imposibilidad, formar una idea exacta del horror de mi situacion: abrí convulsivamente la boca para respirar, y un calofrío, semejante al producido por la calentura, recorrió mis nérvios y ojos de sus órbitas; un mareo espantoso me dominó y me desmayé perdiendo completamente el músculos y todo mi sér; creí saltaban mis conocimiento.

No podré fijar el tiempo que en tal estado permanecí; pero debió de trascurrir mucho, porque cuando recobré en parte el uso de los sentidos, ví que amanecia ya; el globo se hallaba á una altura prodigiosa y sobre la inmensidad del Occéano, no percibiéndose en todo aquel vastísimo horizonte señal alguna de tierra. Al volver en mí no esperimenté sensaciones tan dolorosas como era de creer debia sufrir, y á la verdad podia con harta exactitud calificarse de locura la contemplacion plácida con que en un principio me puse