Página:La ciudad de Dios - Tomo II.pdf/362

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
360
San Agustín

CAPÍTULO XII

Qué debe responderse a los que ponen por inconveniente que fué tarde la creación del mundo.


Pero lo que respondimos cuando se ventilaba la cuestión acerca del principio y origen del mundo á los que no quieren creer que no fué ó existió siempre, sino que empezó á ser, como también expresamente lo confiesa Platón, aunque algunos crean que sintió lo contrario de lo que dijo, eso mismo responderé sobre la creación del hombre por satisfacer exactamente á los que asimismo se ofenden, por qué el hombre no fué criado inumerables é infinitos tiempos antes, y por qué fué criado tan tarde; pero en la Sagrada Escritura observamos que está escrito que ha menos de seis mil años que principió á ser: pues si ofende á éstos la brevedad del tiempo, viendo que se les figuran tan pocos años, contando desde donde refieren nuestras memorias auténticas que fué criado el hombre, consideren que no media un tiempo diuturno ó largo, donde se halla que hay extremo y último, y cualesquiera espacios y siglos finitos y li' mitados cotejados con la infinita eternidad sin límites, no deben tenerse por pequeños, sino por ningunos, y, por consiguiente, si dijésemos, no cinco ó seis mil, sino sesenta ó seiscientos millares de años, ó si por otros tantos, otras tantas veces se multiplicara esta suma, de conformidad que no tuviésemos nombre, número ó guarismo con que numerar los años después que crió Dios al hombre, de la misma manera puede preguntarse por qué no le crió antes; mediante á que la cesación eterna que tuvo Dios antes de criar al hombre sin principio es tan grande, que si comparamos con ella cualquiera número de tiempos, por grande é infinita que