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San Agustín

sas corporales de la naturaleza que á las admirables obras de la divina Providencia.



CAPÍTULO XXIV

Si puede decirse que los angeles han criado alguna criatura, por minima que sea.


Pero en estos libros no tratamos ni disputamos con los que no creen que la Majestad Divina es el autor de estas cosas ó el que cuida de ellas: con todo, aquellos que creen á su Platón y sostienen que el sumo Dios que hizo el mundo no crió, sino que con su licencia ó mandato, otros menores que él mismo hizo, criaron todos los animales mortales, y entre ellos al hombre, para que obtuviese el lugar más principal y más próximo á los mismos dioses, si estuviesen exentos de la superstición con que pretenden demostrar que justamente los adoran y ofrecen sacrificios como á autores y criadores suyos, fácilmente se libertarán también de la falsedad y engaño de esta opinión: porque no es lícito creer ó afirmar que otro que Dios sea criador de ninguna criatura, por más mínima y mortal que sea, aun antes que pueda esto dejarse entender; y así los ángeles, á quienes ellos con más gusto llaman dioses, aunque aplican, ó mandándoselo Dios ó permitiéndoselo, su operación á las cosas que se crían en el mundo, sin embargo, no son más criadores de los animales que lo son los labradores de las mieses y plantas.