CAPÍTULO XI
De esta diferencia entre los libros hebreos y los nuestros nace aquella celebrada cuestión donde se saca por la cuenta que Matusalén vivió catorce años después del Diluvio. La Sagrada Escritura dice positivamente que en el Diluvio, de todos los que había sobre la tierra, sólo ocho personas escaparon en el arca de la ruina universal, en las cuales no fué incluído Matusalén.
Pero, según nuestros libros, Matusalén, antes que engendrase á aquel que llamó Lamech, vivió ciento sesenta y siete años; después el mismo Lamech, antes que naciese de él Noé, vivió ciento ochenta y ocho años, que juntoa suman trescientos cincuenta y cinco; á éstos se añaden seiscientos de Noé, en cuyo sexcentésimo año acaeció el Diluvio; y todos juntos hacen novecientos cincuenta y cinco desde que nació Matusalén hasta el año del Diluvio. Todos los años que vivió Matusalén se cuenta que fueron novecientos setenta y nueve, porque habiendo vivido ciento sesenta y siete engendró un hijo que se llamó Lamech, y después de haberle procreado vivió ochocientos dos años, que todos ellos, como he dicho, hacen novecientos sesenta y nueve, de los cuales, extrayendo novecjentos cincuenta y cinco desde que nació Matuaalén hasta el Diluvio, quedan catorce, que se cree que vivió después del Diluvio; por ello imaginan algunos que vivió, aunque no en la tierra, donde es constante que pereció toda la humana generación, que no permite la naturaleza que se conserve y viva en el agua, sino que vivió algún tiempo con su padre, que fué trasladado hasta que pasó
