Página:Las cuitas de Werther (1919).pdf/31

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
27
 

blar un conocimiento que se va encarnando por mis entrañas. Acabo... no acierto.

Para proceder por partes. cómo se ha rodeado el tropezar con este primor de los primores, es ardua empresa. Estoy en todas mis glorias, y, por tanto, soy un historiador torpisimo..

¡Un ångel!... ¡ay! cada cual apellida asi a su dueño del alma; no es lo que sucede? No alcanzo, sin embargo, a descifrarte cuán cabal es, y en qué y cómo; ello es que embargó todas mis potencias.

Tan sumamente sencilla y despejada, tan cariñňosa y tan formal, tan sosegada de temple, siendo la misma travesura y la propia actividad...

Un chapuz, un mamarracho, es lo que rasgueo; dictados campanudos que ni un asomo expresan.

Otro dia...; no, otro dia, no; ahora mismo te lo voy a referir. Si no lo hago ahora, no lo hago nunca. Acá para nosotros, desde que me he puesto a escribir, tres veces he tenido impulsos de soltar la pluma, mandar ensillar el caballo y dar por ahi mi carrera. Sin embargo, me juramenté desde la madrugada para no cabalgar, y, entretanto, me estoy pormomentos asomando para ver a qué altura está ya el sol.

No puedo conmigo; tengo que ir a ella. Al punto estoy de vuelta, Guillermo. Cenaré mi manteca y te escribiré. ¡Qué regalo es para mi alma el verla acaudillando los traviesos y donosos niños, sus ocho hermanillos!...

Si yo continuase asi. vendrias al fin a quedar tan enterado como al principio. Oye, pues, voy a violentarme explayándome en mis pormenores.