¡Prodigan amor falso cuando la perfidia las llena y forma como la trama de sus vestidos!
¡Recuerda respetuosamente las palabras de Yusuf! ¡Y no olvides que Eblis hizo que expulsaran á Adán por causa de la mujer!
¡No te confíes, amigo! ¡Es inútil! ¡Mañana, en aquella que creas más segura, sucederá al amor puro una pasión loca!
Y no digas: «¡Si me enamoro, evitaré las locuras de los enamorados!» ¡No lo digas! ¡Sería verdaderamente un prodigio único ver salir á un hombre sano y salvo de la seducción de las mujeres!
Los dos hermanos, al oir estas palabras, se maravillaron hasta más no poder y se dijeron uno á otro: «Si éste es un efrit, y á pesar de su poderío le han ocurrido cosas más enormes que á nosotros, esta aventura debe consolarnos.» Inmediatamente se despidieron de la joven y regresaron cada uno á su ciudad.
En cuanto el rey Schahriar entró en su palacio, mandó degollar á su esposa, así como á los esclavos y esclavas. Después ordenó á su visir que cada noche le llevase una joven que fuese virgen. Y cada noche arrebataba á una su virginidad. Y cuando la noche había transcurrido mandaba que la matasen. Así estuvo haciendo durante tres años, y todo eran lamentos y voces de horror. Los hombres huían con las hijas que les quedaban. En la ciudad no había ya ninguna doncella que pudiese servir para los asaltos de este cabalgador.
En esta situación, el rey mandó al visir que, como de costumbre, le trajese una joven. El visir, por más que buscó, no pudo encontrar ninguna, y regresó muy triste