Página:Las veladas del tropero (1919).pdf/182

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
— 178 —

LAS BRUTALIDADES DE PLACIDO

No porque lo mereciera, sino por haber nacido el 5 de octubre, se llamaba Plácido; y á pesar de ese nombre, por demás simpático y tranquilizador, no había en toda la Pampa gaucho más bruto.

Maltrataba á troche y moche los animales, sin conocer otro medio de imponerles su voluntad que los golpes y los castigos. De puro gusto les hacía sufrir, no teniendo mayor gozo que azotar brutalmente un caballo ó degollar despacito una oveja.

Hacía víctimas de su crueldad hasta á los inocentes bichos del campo matándolos aunque fueran animales inofensivos y hasta útiles, cuando los podía agarrar, y siempre con refinamientos que demostraban sus perversas inclinaciones, sus resabios de salvaje.

Para vivir es ley ineludible matar, pero el rey de la creación debe tratar á sus súbditos sin inútil rigor.

Los patrones sucesivos y ya numerosos de Plácido, pues en ninguna parte le podían aguantar las atrocidades que cometía, especialmente con los caballos de servicio, siempre le profetizaban que algún día, seguramente, se tendría que arrepentir de su brutalidad y que encontraría en sus mismos actos su castigo.

El se reía: alto, fuerte y morrudo, capaz, al pa-