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Plutarco.—Las vidas paralelas.

alcázar, habiendo perdido el dorado; y el templete que se conserva en el templo de Baco entre los trípodes ofrecidos en iguales ocasiones: porque conduciendo coros, venció muchas veces, y en ninguna fué vencido. Dícese que en uno de estos coros compareció representando en el adorno á Baco un esclavo suyo de hermosa disposicion y figura, todavía imberbe; y que habiéndose agradado los Atenienses de su presencia, y aplaudido y palmoteado por largo rato, levantándose Nicias, había expresado que tenía á sacrilegio estuviese en la esclavitud un cuerpo celebrado por su semejanza con el Dios, y había dado la libertad á aquel mozo. Tambien se conservan en la memoria, come brillantes y dignos de tan alto objeto, los festejos que hizo en Delos: porque lo regular era que los coros enviados por las ciudades á cantar las alabanzas de Apolo, durante la navegacion fuesen como á cada uno le cogia, y que acudiendo mucha gente á la llegada de la nave, se les hiciera cantar sin ningun órden saltando en tierra en confusion, y tomando las coronas y los trajes de la misma manera; mas él, cuando condujo la teoría, aportó á Rene con el coro, con las víctimas y todas las prevenciones, y llevando desde Alenas un puente construido con las dimensiones convenientes, y adornado magníficamente con dorados, con colores, con coronas y alfombras, por la noche le echó sobre el espacio que media entre Rene y Delos, que no es grande. Al dia siguiente al amanecer condujo la procesion que se hacía al Dios, y el coro adornado primorosamente y cantando, y los pasó por el puente. Despues del sacrificio, del combate y del festin presentó al Dios en ofrenda una palma de bronce, y habiendo comprado un terreno en diez mil dracmas, se lo consagró con destino á que de sus rentas tomaran los de Delos lo necesario para sacrificar y dar un banquete, rogando á los Dioses por la prosperidad de Nicias. Porque así lo hizo escribir en la columna que dejó en Delos como monumento de esta dádiva; y la palma, quebrantada de los