Página:Las vidas paralelas de Plutarco - Tomo III (1879).pdf/427

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
429
POMPEYO.

tad, sino su conformidad y concordia la que habia sido para la república la primera y más cierta causa de sus males. Porque fué César elegido cónsul, y dedicándose al punto á adular al desvalido y al pobre, propuso leyes para enviar colonias y repartir las tierras, prostituyendo la dignidad de su magistratura, y convirtiendo el consulado en tribunado de la plebe. Opúsosele su colega B:bulo, y como Caton se preparase á sostener con viveza su partido, trajo César al tribunal á Pompeyo á vista de todo el pueblo; y saludándole le preguntó si abogaria por las leyes, y contestóle que sí. «Pues si alguno, continuó, usaše de fuerza contra elias, ¿te pondrás de parte del pueblo en su auxilio?—Sin duda, volvió á responder Pompeyo, y contra los que amenacen con espadas traeré espada y escudo.» Nunca Pompeyo tabia hecho ó dicho hasta aquel punto cosa tan arrojada é insolente; tanto, que sus amigos hubieron de tomar su defensa, excusándole con que aquello no había sido más que un pronto; pero en todo cuanto despues hizo se vió bien claro que se habia entregado á César para cuanto se intentase. Porque al cabo de pocos dias, cuando nadie podia esperar tal cosa, se casó con la hija de César desposada con Cepion, con quien estaba á punto de casarse; y para templar de algun modo el disgusto de Cepion le propuso su propia hija, que antes habia sido prometida á Fausto, hijo de Sila: y César se casó con Calpurnia, hija de Pison.

Llenó despues de esto Pompeyo la ciudad de soldados, y ya todo lo obtenia por la fuerza; porque al cónsul Bibulo en ocasion de bajar á la plaza con Lúculo y con Caton, saliéndole repentinamente al encuentro, le rompieron las fasces; uno de ellos vació sobre la cabeza del mismo Bibulo una espuerta de basura; y dos tribunos de la plebe, que le acompañaban, fueron heridos. Con esto dejaron despejada la plaza de los que habian de hacerles oposicion, y sancionaron la ley del repartimiento de tierras, la cual les sirvió