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Plutarco.—Las vidas paralelas.

despues que la ciudad le habia condenado á muerte, «pues yo, repuso, les haré ver que vivo.» Consérvase memoria de que la delacion estaba concebida en estos términos: «Tésalo de Cimon Lasiade denuncia á Alcibiades de Clinias, Eseambonide, de haber ofendido á las Diosas Céres y su hija, remedando los misterios y divulgándolos á sus amigos en su casa, habiéndose puesto el ornamento que lleva el Hierofanta cuando celebra los misterios, tomando él mismo el nombre de Hierofanta, dando á Polution et de porta—antorcha, y á Teodoro Fegés el de proclamador, y llamando á sus amigos iniciados y adeptos, contra lo justo y lo establecido por los Eumolpidas, los proclamadores y los sacerdotes de Eleusis.» Condenároule en rebeldía, y confiscaron sus bienes, y mandaron además que todos los sacerdotes le maldijesen, á la cual resolucion solamente se opuso, segun es fama, Teano la de Menon de Agraulo, diciendo que era sacerdotisa para bendecir, no para maldecir á nadie.

Cuando estos decretos y estas condenaciones se pronunciaron estaba detenido en Argos, porque al fugarse de Turios lo primero que hizo fué irse al Peloponeso; pero temiendo á sus enemigos, y renunciando del todo á su patria, escribió á Esparta, pidiendo que se le ofreciese la impunidad, y dando palabra de que les haria favores y servicios que excedieran con mucho á los daños que ántes les habia causado. Concediéronselo los Esparciatas, y recibido benignamente de ellos, luego que pasó allá, el primer servicio que al punto les bizo fué que andando en consultas y dilaciones sobre dar auxilio á los Siracusanos, los movió y acaloró á que enviasen por general á Gilipo, y quebrantasen las fuerzas que allí tenian los Atenienses; fué el segundo hacer que ellos mismos por sí moviesen á estos guerra; y el tercero y más granado hacerles murar á Decelea, que fué lo que más perjudicó y contribuyó á la ruina de Atenas. Estimado, pues, por sus hechos públicos,