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cuyos troncos se han petrificado por la acción constante de las aguas.
En cuanto-a la vida animal, sólo está representada por al- gunas familias. No obstante, en la gobernación de Santa Cruz, que es un poco menos fría que la de Tierra del Fue- go, la oveja se cría de un modo admirable, por lo cual la ganadería es la ocupaciór preferente de sus habitantes.
¿Han visto ca alguna vez? ustedes.: Si no los han
a visto, cuando menos habrán oído hablar de estos muy cu- riosos anima- les de la cos- ta patagónica. 'Suele llamár- seles también pájaros-bobos, sin duda por la apariencia que les da la manera de sostenerse sobre sus patas, manteniendo el cuerpo en posición vertical y de- jando colgar pesadamente a ambos lados sus cortas alas sin gracia.
Un célebre viajero de las regiones antárticas, los des- cribe así: «Imagínese un ser pequeño y derecho, de poco más de un pie de altura, con dos patas que sostienen un cuerpo mal proporcionado, cabeza redonda y dos alas es- trechas y pequeñas que, cuando anda en tierra, pueden tomarse por dos brazos con las manos metidas en los bol-
Una colonia de pájaros-bobos.
