Página:Menosprecio de corte y alabanza de aldea (1922).pdf/95

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida

CAPITULO X

QUE EN LAS CORTES DE LOS PRÍNCIPES NINGUNO :PUEDE BIVIR SIN AFECCIONARSE A UNOS Y APAS.

SIONARSE CON OTROS.

En la corte muchas cosas se compran las quales son para servir y no para fuera de allí las llevar.

Paresce esto ser verdad en que, llegando a la corte, ha de buscar ropa para la gente, pesebres para las bestias, tablas para las camas, mesas para aparadores, ollas para la cozina, cántaros para agua, espuertas para la despensa, encerados (1) para las ventanas, platos para la mesa, esteras para el suelo, puertas para las cámaras, cerraduras para las arcas, jarras para bever y aun (2) escobas para barrer. En la corte muchas cosas haze un cortesano más porque las hazen otros que no porque las querría él hazer. 10 pobre del cortesano!, el qual banquetea por no ser—hipócrita, juega por no ser mezquino, murmura por no ser extremado, sirve a las damas por no ser frío, acompaña a otros por no ser solitario, da a truhanes porque no digan mal dél, contenta a las enamoradas porque no le (1) Encerados: lienzos dados de cera para reaguardar del agua las ventanas, (2) Y aun: y finalmente.

.