APARICION DE GRUPOS DE ESPECIES por 375 periores hasta 50 brazas; por la manera perfecta de haberse conservado ejemplares en las capas terciarias más antiguas; la facilidad con que hasta un fragmento de válvula puole ser reconocido; por todas estas circunstancias, deducia yo que si hubieran cxistido cirrípidos sesiles durante los períodos secundarios , hubieran sido ciertamente conservados y desc:1- biertos; y como ninguna especie se habia descubierto entón- ces en yacimientos de osa edad, concluia que este gran grupo habia sido repentinamente desarrollado en el principio de la scrie terciaria. Este era un disgusto amargo para mí, porque pensaba yo entonces que venia a ser un caso más de la brusca aparicion de un gran grupo de especies. Pero apenas habia acabado de publicar mi obra, cuando un hábil paleontólogo, M. Bosquet, me envió el dibujo de un ejemplar perfecto de um cirrípedo sesil inequivocable, que él mismo habia extraido de la marga en Bélgica. Y para que este caso fuera todavía más extraordinario, era este cirrípodo un chthamalus, género muy comun y grande y que en todas partes se encuentra, del cual no se ha hallado todavía ni una especie siquiera en ninguna capa terciaria. Todavía más recientemente ha des- cubierto Mr. Woodward en la creta superior una pyrgoma, que os de una sub-familia distinta de los cirrípedos sesiles; do manera que ahora tenemos pruebas abundantes de la existen- cia de este grupo de animales en el período secundario. Il caso que con más frecuencia citan con insistencia los paleontólogos, de la aparicion al parocer repentina de un grupo entero de especies, es el de los peces teleosteáneos en las capas inferiores del período de la creta, segun Agassiz. Este grupo incluye la gran mayoría de las especies existentes. Pero ciertas formas jurásicas y triásicas, cstán hoy comunmente admitidas como teloosteánoas; y aun algunas formas paleozói- cas han sido del mismo modo clasificadas por altas competen- cias. Si los telcostcáncos hubiesen aparecido realmonte do re- pente en el hemisforio septentrional al principio de la forma- cion do la creta, el hecho hubiera sido muy notable, pero 110 hubiera formado una dificultad insuperablo; á menos que pu- dicra haberse demostrado tambien que en el mismo período fueron desarrollados repentina y simultáneamente en otras partes del mundo. Es casi supérfluo hacer notar que apenas se conoce un pez fósil al Sur del Ecuador; y recorriendo la pa-