y han aceptado los principios justos y liberales que regulan su política. El desorden sólo se mantiene por algunos dirigentes, dejándose llevar por pasiones antipatriotas y asistido por personas desmoralizadas que no pueden llegar al nivel de principios políticos y por una soldadesca inmoral, los tristes últimos vestigios de las guerras civiles.
En adelante, la lucha será sólo entre los hombres honorables de la nación y pandillas de delincuentes y ladrones. No habrá ahora clemencia, que sólo beneficiaría a la turba para quemar aldeas, robar y asesinar a ciudadanos pacíficos, ancianos pobres y mujeres indefensas.
El Gobierno apoyado en su poder, desde este día será inflexible en sus castigos , ya que las leyes de la civilización, los derechos de la humanidad y las exigencias de la moral lo exigen.
México, 2 de Octubre de 1865.
En otras palabras las tropas francesas y mercenarias habían empujado a Juárez a la frontera— nunca la cruzó pero la afirmación fue hecha para el efecto—y el Imperio ahora sentía lo suficientemente fuerte como para quitarse la máscara e izar la bandera negra en forma; lo había hecho, de hecho y en la práctica, desde el principio, pero había hecho un espectáculo de clemencia, con el fin de conciliar la opinión pública y cegar los ojos del mundo en general, hasta llegó el tiempo cuando con seguridad podía adoptar una política verdaderamente imperial, como sería en mantener las tradiciones de la casa de Lorena Habsburgo.
Al día siguiente después de la publicación del decreto arriba citado, el famoso e infame "Decreto de Bandera Negra", que costó a Maximiliano su vida dos años más tarde, fue firmado y emitido. Este muy notable documento de nuestro tiempo fue como sigue:
Habiendo oído a nuestros ministros y nuestro Consejo de Estado; decretamos:
