Azteca se encuentran. Probablemente ninguna ciudad del mundo hoy habitada, tiene tantas reliquias antiguas enterradas debajo. La acumulación por siglos gradualmente ha elevado la superficie de toda la ciudad, y edificios erigidos hace unos cien o doscientos años han perdido la totalidad o una de parte de sus pisos más bajos, en muchos casos. En la residencia del Sr. Hammekin, Calle Independencia, Nº 1, que comprende una de parte del antiguo convento de San Francisco, me enseñaron un pozo de doce pies de profundidad, cuyo fondo es el antiguo nivel de la superficie del patio, y las marcas de antiguas escaleras, etc., etc., en las paredes de piso inferior, muestran que el relleno para llegar al nivel actual de las calles, no podía ser menos de seis a doce pies.
El Señor Altamirano, el mejor erudito Azteca vivo, afirma que la prueba es concluyente de que los aztecas no llegaron aquí desde Asia, como se ha considerado casi universalmente, pero que fueron una raza originaria de América y tan antigua como los propios chinos, y que China incluso pudo haber sido poblada desde América. Señala que en sus viejos mapas y gráficos, hay varias cosas que Humboldt incomprendido y por lo cual hizo un error, y demuestra que los aztecas, efectivamente, ocupaban Arizona en el siglo Quince como Humboldt supone, pero sólo como una colonia enviada desde el Valle de México—no como un pueblo haciendo una escala temporal en una larga marcha en busca de un nuevo hogar. Si él tiene razón, y creo que la tiene—extensas excavaciones en la "tierra hecha" de México, daría lugar a interesantes revelaciones.
Frecuentemente había oído hablar del gran Nacional Monte de Piedad de México, en términos de inmerecida
