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APELACIÓN DEL REVERENDO SR. RILEY.

y folletos cristianos en toda la República con gran efecto. Los envía a Gobernadores de Estados, y muchos de los hombres más influyentes de la nación. Muchos jóvenes se están preparando para el Ministerio del Evangelio. Cuán grande sería el mal si le quitaran la Biblia a la gente en los Estados Unidos; cuán grande sería el regalo y sus bendiciones, si fueran dadas a la gente en México, amplia y generalmente. Muchos están empezando a leer, amar, y seguir sus enseñanzas. La mayoría de los grandes, movimientos de progreso y liberales en México han iniciado entre los pobres. Multitudes de pobres ahora se están uniendo con entusiasmo al movimiento del evangelio en México, y están llenos de esperanza, esperando obtener victorias gloriosas para Jesús y su verdad, en esta hermosa pero triste tierra. Espero que cristianos estadounidenses puedan tomar interés en esta obra de evangelizar México. Fondos de ayuda pueden ser enviados—indicando el propósito para el que se envían, a: el trabajo de evangelio conectado con la misión en la Ciudad de México—al Reverendo Dr. Butler, Unión Cristiana Estadounidense y Extranjera, Casa de la Biblia 27, Nueva York.

El pequeño esfuerzo ya iniciado a nombre de México ha obtenido resultados maravillosos, a través de la bendición de Dios, y debería alentar a los cristianos estadounidenses a mayor esfuerzo. Un mexicano relacionado con el ejército, compró una Biblia hace algún tiempo a petición de su esposa. Esta última decidió encontrar los diez mandamientos, y así decidir si el clero romano en sus enseñanzas era fiel a la palabra de Dios o no. Al leer varias veces el segundo mandamiento que suprime la Iglesia romana, dividiendo el décimo en dos, se paró y caminó a través del cuarto a donde tenía una imagen de la Virgen María, que era muy aficionada de adorar, la bajo y la puso al fuego. Su marido, de nombre Ponce de León, fue el héroe de la defensa, durante el reciente ataque de un grupo, propiciado por dos curas vestidos de civiles, contra unos cristianos, reunidos un Domingo en Pueblo. Él ha establecido muchas congregaciones evangélicas y espera reunir cien más antes del final del año próximo. Cristianos más abnegados, heroicos, devotos, celosos y fieles que ellos