Página:Paginas de Historia - Bartolomé Mitre.pdf/206

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
— 193 —

en una de las pintorescas quiutas del Miguelete.

El vicario apostólico fué sentado á la cabecera le la mesa del banquete, y el canónigo Mastai fo colocado entre una prima donna italiana y una bailarina francesa, que, juntamente con un tenor milanés y un bufo napolitano, que unidos á dos compañías de teatro, canto y baile, y gran númer de serdbtes y seglars, formaban parte de lo invitados, encontrándose allí el inolvidable Vacanui, ereador del Barbero de Sevilla en el R de la Plata. Algunos, de los artistas habían sido expresamento llevados de Buenos Aires para obscquiar á los distinguidos huéspedes. He aquí el retrato que de las damas hace el P. Sallusti: "Ja cautatrix italiana y la bailarina francesa unían á au brío y vivacidad natural una belleza afectada, un elegante traje y un fantástico tocado dispuesto con caprichosa macstría".

A los postres se cantaron las más bellas composiciones de Rossini, cuyas armonías llenaban el mundo, terminando con el Di tanti palpiti di tant pene, ejecutado por la prima donna y el tenor, que fueron estrepitoaamuote aplandidos, incluso por im frailo español que hacía de bajo.

Los viajeros creyeron ver en esta fiesta una es cena premeditada para comprometer su carácter sacerdotal, pero, hombre social y de carácter amenu, el canónigo Mastai no lo tomó á mal.

Años después, la Italia primero y el muud después, entonaban un himno de Rossini que Jacka palpitar todos los corazones:

Pace, pare risuoni ogul Ildo,.

Gioja, gloja rispondi cgni ecte; Benedetto 11 aorrisso d'amore Che schlude a salute it sontler.