Página:Poesías de Evaristo Carriego.djvu/190

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
178
Evaristo Carriego.

EL VELORIO


Como ya en el barrio corrió la noticia,
algunos vecinos llegan consternados,
diciendo en voz baja toda la injusticia
que amarga la suerte de los desdichados...

A principios de año, repentinamente
murió el mayorcito... ¡Si es para asustarse:
apenas lo entierran cuando fatalmente
la misma desgracia vuelve a presentarse!

En medio del cuadro de caras llorosas
que llena el ambiente de recogimiento,
el padre recibe las frases piadosas
con que lo acompañan en el sentimiento...

Los íntimos quieren llevárselo afuera,
pues presienten una decisión sombría
en su mirar fijo: de cualquier manera
con desesperarse nada sacaría...