Página:Prevost - Manon Lescaut (1919).pdf/189

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
187
 

reputación, me ofrecería su brazo y su espada para librar a mi amante.

Aquella generosidad excesiva me conmovió hasta hacerme llorar. Empleé para manifestarle mi agradecimiento toda la viveza que mi aflicción me permitía. Le pregunté si no podía esperar algo por el camino de las súplicas al jefe de Policía; respondióme que ya había pensado en ello, pero que creía inútil aquel recurso, puesto que una gracia de tal naturaleza no podía pedirse sin motivo, y no veía de qué medio nos podríamos valer para convertir en intercesor a una persona seria y pudiente; que, de poder conseguir algo por ese lado, sería solamente haciendo cambiar de idea a G M y a mi padre, comprometiéndoles a que pidieran ellos mismos al jefe de Policía que revocara la sentencia. Me ofreció hacer cuanto pudiera para ganar al joven G M, aun cuando le creyese un poco frío con él, por las sospechas que tenía de su intervención en nuestro asunto, y me aconsejó que no omitiera nada por mi parte para ablandar a mi padre.

No era aquello floja empresa para mí; y no solamente por la dificultad con que, naturalmente, había de tropezar para vencerle, sino por otra razón que me hacía hasta temer acercarme a él: me había escapado de su alojamiento, contraviniendo sus órdenes, y estaba decidido a no volver alli después de saber el triste destino de Manon. Temía, con fundamento, que me obligara, a pesar mío, a quedarme allí, e incluso que me llevara a Day O