LA SARGENTO CANDELARIA
Era á mediados de 1537 cuando el Gobierno de Chile por agravivs que á su soberanía habíale infe- vido el de la Confederación Perú-boliviana, le decla- ró la guerra mandando con la premura del caso uba fuerte expedición pura derrocarle.
Á uta humilde santiaguína, sin instrucción nj eo- nocimientos generales de ninguna especie, pero con un valor á toda prueba, le cupo la gloria de tomar parte activa cn es: memorable campaña, prestando importantes servicios á la causa de su país, Llamá- base Candolaria Pérez, y tam pobre se hallaba co Chile en 1832 que se vió obligada á dejar sus la- ros, acompañando en ealided de sirviente á una fa- amilia que marchaba á establecerse en cl Perú.
A los tres años y con algunos ahorrillos que ha- bix logrado obtener á fuerza de privaciones, so in- dependizó de sus patrones, estableciendo un peque- ño café en el Callao, al que acostumbraban conen- rrir «síduamente marineros ehilenos, por lo cual sus compatriotas bautizironlo con el nombre de fonda chilena,
