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El donante lo compró en San Luis, al pasar por una estacion del Ferro-Carril y lo alimentó con biscotelas mojadas en leche y áun con ésta. Tuvo la bondad de llevarlo en una canastita llena de algodon. Dile al instante el alimento que había recibido en cautividad. Comía la biscotela bien reblandecida en la leche, alzándola con la larga lengua que doblaba como hacen los perros para beber, operacion que practicaba con rapidez, tanto que se podría haber dicho que bebía. Una vez que hubo consumido como un centímetro cúbico de la parte reblandecida, bebió algo más de leche y del mismo modo. Coloquélo entónces entre sus algodones y quedó quieto. A las dos de la mañana, volví á ofrecerle alimento, y lo tomó del mismo modo.

Al dia siguiente, poco antes de las nueve de la mañana, volví á ofrecerle su racion, pero no aceptó. Díle entonces una miga de pan mojada en té con leche y tomó muy poco, pero con gusto. Lo traje al Jardin Zoológico y lo entregué al Guardian que cuida los Mamíferos pequeños, ordenando al mismo tiempo que se le construyera una casilla de madera con paredes de vidrio y forrada por fuera con alambre tejido. Indiqué al cuidador que siguiera dándole el mismo alimento, esto es, biscotelas ó plantillas en leche, pero que probara algo mas.

Comió algunos pedacitos de carne cruda raspada, y, como manifestase gusto en ello, dije al Guardian que procurase darle, como ensayo, algunos gusanitos.

Comió bien orugas del Bicho de cesto (Oiketicus) y tambien larvas pequeñas del gusano de la harina (Tenebrio molitor), al tercer dia, su apetito era escaso y se hallaba descompuesto, lo que atribuí á la carne cruda, que hice suspender. Desde entónces no ha tenido novedad.

Tiene el Pichi-ciego una figura extraña en la cual se reconoce inmediatamente la familia á que pertenece, pero tambien con caracteres propios, de los cuales ya he señalado algunos. Su nombre griego de Clamydophorus alude á la clámide ó esclavina ó palio que cubre su cuerpo, esto es, á su coraza ó caparazon.

El específico latino truncatus se refiere á la truncatura posterior, determinada por el escudo pelviano. La cabeza es un tanto acarnerada y bastante convexa en lo anterior, con escudo cartilaginoso mal indicado, muy blando y delgado, en el que las placas son poco definidas. Cuando camina ó reposa, hace uso de la cola como de un quinto miembro, pues apoya fuertemente en ella, como lo hace el Cangurú entre los Marsupiales (y tambien el Mataco), y los Carpinteros ó Pícidos entre las Aves, y, hasta cierto punto, las Poduras entre los Insectos.

Toda su piel visible es rosada pálida; sus pelos, bastante abundantes y delicados, son blancos de nieve, y así tambien los penachitos ó pestañas que sobresalen de cada lado del caparazon en todas las fajas. Las placas son parduscas, pero todas las articulaciones de las mismas son rosadas, como la mayor parte del escudo posterior y la cola. El escudo anterior de la cabeza es rosado con