82 | CÁMARA DE SENADORES |
dad del señor Ministro, Juan Ramón Casanova. —Al señor Presidente del Senado.
Núm. 130
El ciudadano don ▼Pedro Urriola, electo senador por la provincia de Colchagua, ha pasado al Gobierno la comunicación i documentos que acompaño orijinales, para que, informado de ellos, el Senado resuelva lo que estime conveniente sobre la formal ▼renuncia que hace del espresado cargo. —Dios guarde a V. E. —Santiago, Junio 3 de 1831. —Fernando Errázuriz. —Por enfermedad del señor Ministro, Juan Ramón Casanova. —Al señor Presidente del Señado.
Núm. 131
▼La Asamblea de esta provincia me ha nombrado para que la represente en la Cámara de Senadores; i aunque tal confianza me es mui honrosa, motivos poderosos me impiden correspondería, ejerciendo las funciones anexas al encargo. Las elecciones de Curicó adolecen en mi concepto de nulidades que vician en su orijen la de Senadores, i ésta es una de las razones que me aconsejan la dimisión; pero aun cuando las Cámaras no estimasen bastantes los fundamentos en que se apoyan, contenidos en el espediente que acompaño, i declarase legales las elecciones de Curicó, no variaría por esto mi resolución; pues estoi persuadido que mi honor i mi deber se comprometerían admitiendo una diputación que además es incompatible con el empleo que ejerzo.
Ruego a V. S. que, dando cuenta a S. E. el Vice-Presidente de esta mi formal renuncia i de los documentos referidos, se sirva elevarlo todo a la Representación Nacional. —Dios guarde a V. S. muchos años. —San Fernando, Mayo 28 de 1831. —Pedro Urriola. —Señor Ministro del Interior.
Santiago, Junio 3 de 1831. —Pase a la Cámara de Senadores con el correspondiente oficio. —(Hai una rúbrica). —Casanova.
Núm. 132
Habiéndose reunido anoche en sesión estraordinaria la Cámara de Diputados, con el esclusivo objeto de hacer la elección de su Presidente, Vice-Presidente i Secretario, se procedió al acto i recayó el primer cargo en el que suscribe, el segundo en el señor don Pedro Uriondo i el tercero en el señor don Manuel Camilo Vial.
Tiene la honra el Presidente que suscribe de participarlo al conocimiento del de igual clase de la Cámara de Senadores, i de felicitarle por la acertada elección que esa Sala ha hecho de su persona.
El Presidente que suscribe saluda al señor Presidente del Senado con las manifestaciones de su afectuosa consideración i aprecio. —Santiago, Junio 2 de 1831. —Joaquín Tocornal. —Ramón Renjifo, Diputado Secretario interino. —Al señor Presidente de la Cámara de Senadores.
Núm. 133
Soberano Señor:
▼La que suscribe, como madre de José Villavicencio, soldado del batallón número 4 de Cazadores, ante V. E. respetuosamente espone: Que mi dicho hijo está condenado a muerte por delito de deserción i próximo a marchar al patíbulo sin que me quede recurso alguno para salvarle la vida ante los Tribunales de Justicia. Pero aun no he desesperado; porque, acojiéndome a la induljencia de este Soberano Cuerpo, espero conseguir el remedio de tantos males que me amenazan en lo sucesivo con la pérdida del único hijo hombre, que me socorría en mis necesidades.
Al cabo de tantos años de sacrificio por la causa de la libertad, ha conseguido Chile la instalación de un Cuerpo Lejislativo, compuesto de los hombres mas idóneos e interesados en la felicidad común. Este es el dia mas memorable que se conoce entre los dignos de recordarse desde el principio de la revolución. Jamás los buenos patriotas lo borrarán de su memoria, i siempre lo recordarán con entusiasmo. En esta virtud, nadie podrá negar que este es un dia estraordinarío, i que el Congreso está facultado para conceder indultos por la parte 13 del artículo 46 de la Constitución.
Estienda la vista este Soberano Cuerpo sobre una infeliz viuda anciana bañada en lágrimas por la pérdida de un hijo que es todo su consuelo, i en el que tenia puestas las esperanzas para que después de los dias de su vida sirviese como de padre a sus hijas mujeres. Tenga presente que he tenido otros hijos, i que los he perdido en el campo de batalla en defensa de la libertad. Advierta también que este infeliz reo condenado a muerte, ha contribuido en esta última revolución con sus servicios a la instalación de esta Lejislatura, poniéndose al frente del coloso enemigo de las leyes, en las jornadas de Coquimbo. Sirvan estas consideraciones, i ser éste un dia estraordinario, para que V. E. se digne indultar de la pena de muerte a mi dicho hijo, conmutándosela en cualquiera otra.
Asi espero se digne resolver este Soberano Congreso.
Es gracia que solicito, etc.
Por la madre de José Villavicencio, Simón Lizama.