Página:Sesiones de los Cuerpos Lejislativos de Chile - Tomo XV (1827-1828).djvu/392

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
384
CONGRESO CONSTITUYENTE

migos. ¡Ah! Si el respeto debido al Cuerpo Nacional lo permitiese, si me fuera dado, repito, trazar con los caractéres de la pluma una carcajada de risa sombreada con una mezcla de desden, éste seria el mejor modo de contestar a semejantes inepcias.

La instalacion del Congreso del año 25 fué precedida de varios papeles públicos donde el nombre de Bolívar se pronunciaba con ternura, con admiracion i con respeto; i miéntras el gobierno de las provincias unidas del Rio de la Plata se disponia en conferirle el mando de los ejércitos combinados contra las tropas brasileras, se incertó en la Gaceta de Chile el artículo titulado "Peluca de Orón dirijido a loar su desinteres i patriotismo. Ahora bien: si el Director Supremo al consultar el proyecto de la espedicion a Chiloé, si los Ministros que asistieron a las sesiones del Congreso, habidas con este motivo por ocho o diez dias consecutivos; si alguno de los señores representantes contempló que de parte del libertador habia miras ambiciosas ¿por qué léjos de anunciarnos alguna cosa o de guardar un profundo silencio sobre la materia el señor Ministro Vial, fiel intérprete de los sentimientos del Director Supremo, recomendó la jenerosidad con que el Presidente de Colombia brindaba para la espedicion de Chiloé, buques, tropas, dinero i todos los elementos de la guerra?

Hasta aquella época se habia reconocido en el que suscribe la imparcialidad de su carácter. El habia desempeñado las funciones de la majistratura, las de ciudadano i buen padre de familia con el honor que es notorio i si me es permitido esprimirme así, su nombre habia varias veces resonado con elojio. ¿No se nos dirá, pues, por qué especie de majia se obró en él i en un instante una revolucion tan súbita i una metamórfosis tan estraña? ¡I qué! ¿No se necesita mas que un momento para pasar de la inocencia al delito? La planta del vicio ¿arribar pudo a su perfeccion sin dar ántes gradualmente señales de que se va ulcerando el corazon? Nó. La naturaleza no ha formado por este estilo el corazon del hombre, ni es tal el curso i marcha de las pasiones, pues tanto en el mal como en el bien se reconoce cierta especie de gradacion en el modo de desenvolverse las facultades del hombre así en lo físico como en lo moral. Desengañémonos, señor. Los que publican que los espatriados traicionaron a la patria en el hecho de solicitar auxilio de los paises estranjeros, no hicieron otra cosa que presentar a un ambicioso el arbitrio de atacarnos i comprometer por esta vía la salud de la República.

Por otra parte es constante que resuelta la espedicion a Chiloé por el Director i bajo el pié de tres mil hombres cuando mas llevó dos mil i tantos, inclusos, mas de mil reclutas disciplinaos en los meses de Setiembre i Octubre, i que para mantener el órden en la capital fué necesario poner a sueldo las milicias de Aconcagua. No lo es ménos que ausente el señor Freire i desprovistas las provincias del Sur de tropas, el malvado Pincheira causó estragos; i que cuando de antemano este bandido no se atrevia a atacar sino los puntos inmediatos a la cordillera, se internó en estos últimos tiempos hasta la Nueva Bilbao, es decir, hasta las costas de Chile. En suma, malograda la espedicion del año 23, en la prudencia del Congreso estaba recuperar el honor i crédito de nuestras armas por todos aquellos medios que estuviesen a sus alcances, porque ademas de ser aventurada la empresa i su suceso debido últimamente, no al valor de nuestras tropas sino a intelijencias secretas i ciertas combinaciones, nosotros no habíamos celebrado pacto alguno con la victoria. En semejantes circunstancias i cuando el desabrigo de las provincias, los perjuicios irrogados, cuando la sangre de tantas víctimas inmoladas al olfato del ídolo que desprecian i de sus adoradores no ha sabido valer una hecatombe, yo provoco el dictámen de los ciudadanos imparciales. A los amantes, pues, de la humanidad, a las familias desgraciadas, a los que saben el estado de bancarrota en que por entónces nos hallábamos llábamos toca decidir si al impetrar el socorro de mil hombres i trescientos mil pesos en efectivo de los caudales que se nos deben, se comprometió o nó al decoro del Estado.

El que suscribe, señores, jamás hizo ostentacion de su mérito; el honrado mas bien quiso ser que parecerlo. Mas, ya que se le calumnia, no es sino con suma repugnancia que va a recordar uno de los mas pequeños rasgos de su vida. Cuando faltando al decoro de la Nacion i al respeto debido a nuestras autoridades, resolvió el jeneral San Martin la espedicion al Perú, cuando se propuso echar una contribucion a los moradores del reino sin consultar primero el voto del Excmo. Senado, fué necesario reunir el vecindario de la capital en la sala directorial, el doctor Marinesperaba que los señores constituidos en dignidad, que alguno de los que hoi nos calumnian, de esos celosos defensores del pais, reclamasen los derechos del Estado la parte que, éste debia tener en esta empresa como tambien el desprecio de nuestros primeros majistrados; pero desgraciadamente solo un simple ciudadano osó alzar la voz, osó impetrar la observancia de las leyes siendo ésta cabalmente una de las ocasiones en que Chile triunfó del despotismo.

A pesar de todo, éste i otros sacrificios no me conducirán a la dicha, al goce de los derechos sociales, sino que en los momentos mismos en que debiendo disfrutarlos, solo me resta el dolor de no alcanzar a merecerlos. Calumnias, invectivas, destierros, persecuciones han sido i serán el premio de mis servicios i para decirlo todo, a los tiempos del señor Freire estaba reservado el que un Ministro estranjero a nuestra revolucion, i que durante ésta yacia sepultado en las