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ferirá la segunda a la tercera persona, y la primera a las otras dos, para la concordancia del verbo al cual la citada palabra sirva de sujeto. Ejemplos: To- dos (yo, tú, él y ellos) iremos mañana; Todos (tú y ellos) iréis mañana; 'Todos (él y ellos) irán sna- ñiana. Más ejemplos: Oídme, ¿oda la corte. (Czd. 3255)
erarda. —Los padres, Zeodora, somos como las aves; en sabiendo volar el pájaro, ayúdele el atre, y válgale el pico. (L. DE VEGA, D. 6.) Los españoles ofrecemos a la vida un corazón blindado de rencor. (ORTEGA Y GASSET, M. 19.) Todo el pueblo /o de- cimos (G. DE DIEGO, G. 222.) La ciudad entera lo sabemos. (G. DE DIEGO, G. 222.)
2] La regla general expuesta y estudiada en 1] y 1] a], ofrece algunas excepciones muy dignas de ser conocidas, en el sentido de que xo siempre concuerda en número el verbo con el sujeto gramatical a que se refiere. Éstas excepciones, ya sabemos que se llaman silepsis.
Pasamos en seguida, pues, a considerar los prin- cipales casos de silepsis en la concordancia de sujeto y verbo.
3] El verbo que se refiere a un sustantivo colec- tivo, fuede concordar con el regularmente, es decir, en singular, como lo demuestran los siguientes ejemplos:
No va buscando aventuras, como Don Quijote, esta gente; lo extraño, lo raro, es que marchan di vagando por lo desconocido. (AZORÍN, M. 139.) En su Deregrínear por los mares e islas septentrionales, esta gente errática e infortunada ha llegado al palacio del rey Policarpo. (AZORÍN, M. 131.)
