Ir al contenido

Página:Tradiciones argentinas Primera serie.djvu/126

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
— 123 —

su ejemplo lecciones vivas de caridad, practicándola á vista de todos.

Desde 1772 se preocupaba de aquellos que quisieren recogerse (en un estreacto á las faenas cotidianas), meditando sobre los remedios del alma. Cuando el Obispo Malvar le concedió licencia para formar la comunidad de Hermanas del Divino Salvador, en la esquina Independencia y Chacabuco, abrió allí el primer retiro.

Requiriéndose muy luego mayor espacio, benefactores que nunca faltaron en la ciudad de las beneficencias, como Pavón, Albertín, Rodríguez, secundaron sus propósitos, donando el terreno, y con la limosna día á día recolectada, en quince años, pudo el de 1795, inaugurar edificio propio, donde abren sus puertas á cuantos en sus pacíficos claustros buscan un consuelo, nunca negado al alma del creyente...


III

Era el canónigo Silva discípulo aventajado del sabio doctor Alcorta, en cuya aula codeábase con otros tan sobresalientes, como los Domínguez, Guido, Frías, Fernández, Cuenca, Pérez, Irigoyen (Fermín), Obligado, Caffarot y Balcarce, poeta en cuya dulce lira vibraron notas