Página:Sesiones de los Cuerpos Lejislativos de Chile - Tomo XXXIV (1844).djvu/510

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
509
SESION EN 4 DE OCTUBRE DE 1844

Valparaiso, debiendo este último funcionario gozar seis mil pesos anuales mientras tanto no se le proporcione a costa del Erario casa para su despacho i habitacion.

Inmediatamente despues se pasó a reconsiderar el artículo 5.º que ha desechado la Cámara de Senadores i despues de algun debate se dejó para segunda discusion.

Por último, se puso en discusion particular el proyecto de concesion de una pension piadosa en favor de doña Micaela Zuazagoitía i puesto en votacion por escrutinio que hubo que rectificar por la equivocacion de un señor Diputado al tiempo de depositar su voto, resultó dicho proyecto aprobado por mayoría de quince votos contra catorce en la forma siguiente:

"Artículo único. El Congreso Nacional, en atencion a los méritos del finado don Ildefonso Redondo, concede a su viuda doña Micaela Zuazagoitía una pension de diez pesos mensuales durante su vida i miéntras permanezca en viudedad".

En este estado se levantó la sesion a las diez i media de la noche. —Pinto —R. Renjifo.


ANEXOS

Núm. 217

Conciudadanos del Senado i de la Cámara de Diputados:

El Ministro de Estado en los departamentos de Guerra i Marina, os ha impuesto con detencion en su Memoria del presente año de los defectos de grave consecuencia que afectan a la Marina Nacional de Guerra por resultados del sistema seguido hasta aquí de armar buques eventualmente cuando las circunstancias lo exijen, i desatinarlos tan pronto como cesan los motivos que han dado lugar a la medida. El Congreso se habrá penetrado, como yo, de la urjente necesidad de repararles para que la Escuadra Nacional, guardian de nuestras costas i apoyo tutelar de nuestro comercio, llegue a ponerse en estado de cumplir los importantes fines a que está destinada.

Interesado altamente en llevar a cabo ese arreglo, he consultado a los funcionarios a cuyo cargo corren los asuntos de marina, i despues de detenidas consideraciones, he llegado a persuadirme de que ningun bien real i permanente podemos obtener en aquel ramo miéntras no nos resolvamos a mantener en costante ejercicio un pié de escuadra proporcionado a los recursos i necesidades de la República. El primer paso que debe darse en consecuencia de aquel objeto, es adquirir buenos i adecuados elementos materiales, como que ellos son la base sobre la que ha de levantarse el futuro arreglo. Lo defectuoso del material presente de la Escuadra, es talvez una de las mas poderosas causas que la mantienen en su estado de nulidad; porque siendo sobremanera gravoso mantener tripulada constantemente la fragata Chile, i no habiendo objetos en que ocuparla que correspondan por su importancia al costo que su conservacion exije, se ve el Gobierno en la precision de desarmarla i dispersar la marinería que la tripulaba. Las dos goletas que con la Chile forman el total de nuestra escuadra, no son a propósito, por su construccion i armamento, para muchos de los destinos en que debieran ser empleados los buques de su jénero; i de aquí es que el servicio en todas sus ramificaciones se resiente de los embarazos i defectos de las naves en que se presta. Es, pues, indispensable proporcionarse otros buques que, calculados espresamente, harán el servicio de la República, puedan satisfacer las necesidades de la administracion i mantenerse en constante actividad sin ocasionar notables gastos.

Por el informe que acompaña a su Memoria el Ministro del departamento respectivo, os habréis impuesto suficientemente de la necesidad que existe de establecer en nuestros principales puertos cuatro buques menores i un vapor; pero el Gobierno se limita, por ahora, únicamente a proponer al Congreso la compra de un vapor de novecientas toneladas i de dos bergantines-goletas de menor porte.

El vapor parece indispensable para atender con la presteza i eficacia que conviene a las ocurrencias del esterior; los dos bergantines son de todo punto necesarios para cuidar i recorrer el litoral de la República, ya sea persiguiendo el contrabando, ya reconociendo los puertos i caletas de la costa, ya levantando planos i cartas de navegacion, ya socorriendo a las naves mercantes en los casos de naufrajio i avería, que son por desgracia frecuentes, ya efectuando las órdenes Supremas que se les impartiere. Pero, una de las mas señaladas ventajas que traerá la adquisicion de estos buques, es la de proporcionar en ellos una escuela práctica, de que en el dia carecemos absolutamente, a la oficalidad i marinería que la República debe indispensablemente mantener para que se ejerciten en los trabajos de su profesion. Es ésta, a mi juicio, una ventaja que por sí sola bastaría para decidir al Congreso a la admision del proyecto; él no estrechará, sin duda, sus miras al momento presente para ajustar sus deliberaciones a las necesidades del instante que pasa, sino que las ensanchará al porvenir, a donde deben rebotar las leyes.

La Marina no puede, o no debe, por lo ménos, improvisarse, necesita de instruccion teórica, de ejercicio, de reglamentos, de prácticas i de ese espíritu marcial que es su alma i que no se consigue sino por hechos gloriosos o por la conciencia de su propio valer. Si desde ahora no tratásemos de echar los cimientos de nuestra escuadra, prolongaríamos indefinidamente la época en que debemos alcanzar el poder marítimo