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SESION EN 25 DE OCTUBRE DE 1844

Santiago Muñoz Bezanilla, ha acordado el siguiente

PROYECTO DE LEI:

"Artículo único. Se concede, por gracia, a la viuda e hijas del teniente-coronel reformado don José Santiago Muñoz Bezanilla, una pension mensual de 20 pesos para que la disfruten de consumo, miéntras la madre permanezca viuda i las hijas no tomen estado.

Dios guarde a V.E. —Santiago, Octubre 28 de 1844. —Francisco Antonio Pinto, Presidente. Ramon Renjifo, Diputado-Secretario. —A S.E. el Presidente de la República.


Núm. 346

El Congreso Nacional ha prestado su aprobacion al siguiente proyecto de lei, iniciado a consecuencia de la solicitud de doña Juana Ramos viuda del ex capitan de artillería don Rafael Dueñas:

Artículo único. —Se le concede por gracia a la viuda e hijos del ex capitan de artillería don Rafael Dueñas, el goce del montepío militar correspondiente a la clase de capitanes, conforme al reglamento de esta institucion.

Dios guarde a V.E. —Santiago, Octubre 28 de 1844. —Francisco Antonio Pinto, Presidente. Ramon Renjifo, Diputado Secretario. —A S.E. el Vice Presidente de la República.


Núm. 347[1]

El señor Tagle a quien La Gaceta hizo un cargo por no haber contribuido con su voto a la aprobacion del proyecto sobre marina nacional que se discutía en las Cámaras habiendo sido él, el primero que presentara un proyecto sobre marina mercante nos ha favorecido con los fundamentos de su oposicion que tenemos la satisfaccion de insertar. Dice el señor Tagle que no se ha opuesto al proyecto del Gobierno en jeneral i si tan sólo a la compra de un buque de vapor, porque ha creido que el Gobierno no podria sostenerlo sin grandes costos, tanto por los repuestos de maquinaria, que por necesidad vendrian con el vapor, como por los injenieros que deben manejarlo de lo que tambien debia haber un repuesto para prever los casos de muerte o enfermedad. Tambien ha podido algo en mi consideracion, dice el señor Tagle, la razon de no tener aun oficiales de guerra espertos en el manejo de estos buques: que en cuanto a la mocion presentada por él, sobre privilejios a la marina mercante nacional no se le debe hacer inculpacion alguna pues que si ha quedado sin efecto ha sido únicamente por la indiferencia con que la comision encargada de informar quiso mirarla dilatando hasta la época el informe a pesar de sus reiteradas interpelaciones.


Núm. 348[2]

La Gaceta del Comercio de ayer ha comunicado al público los fundamentos que ha tenido el señor Diputado Tagle para no opinar por la compra de un vapor impuesta por el Gobierno; i creemos conveniente hacer algunas observaciones sobre tales fundamentos para que mejor pueda valorizarlos el público.

Pensamos, desde luego, que el señor Tagle se ha formado ideas mui exajerádas sobre la maquinaria de los vapores, sobre el manejo de ellos i sobre sus gastos. A juzgar por su opinion, parece que esta clase de navegacion exijiera una ciencia aparte i un plantel de hombres educados ad hoc; cuando por el contrario, una de sus ventajas es la sencillez de todos su procedimientos. En primer lugar, para ser injeniero de un vapor bastan ciertos conocimientos elementales de matemáticas i un estudio práctico de poco tiempo, si es que no basta la simple rutina: aprendizaje, todo que bajo ningun aspecto puede considerarse superior al que cualquier marino tiene que hacer de su profesion. I si nó, ¿cómo fuera tan fácil como lo es en Europa i en Estados Unidos hallar hombres para injenieros; ni como ganarían estos empleados un sueldo tan pequeño como el que ganan? Nuestro comandante jeneral de marina en su informe de este año al Gobierno ha asignado un sueldo de 100 pesos para los injenieros de primera clase i de 75 pesos para los de segunda; pero es de saber que este sueldo es mui ventajoso, i que ha sido calculado como para atraer con él a cuantos injenieros estranjeros se quiera, o para estimular a los hijos del pais a abrazar esta carrera.

En cuanto a los gastos, un buque de vela consume mas jarcia, mas lona i en jeneral mas pertrechos navales que un vapor; necesita por otra parte mucho mayor número de hombres para su tripulacion i consume por lo tanto mas sueldo i mas víveres.

Es verdad que el carbon de piedra que consume un vapor, puesto en movimiento, contrapesa estas ventajas; de lo que resulta, que un viaje dado, considerado aisladamente, es mas

  1. Este artículo ha sido tomado de La Gaceta del Comercio del 12 de Noviembre de 1844, núm. 856. —(Nota del Recopilador).
  2. Este artículo ha sido tomado de El Mercurio de Valparaíso, de 13 del Noviembre de 1844, núm. 4979. —(Nota del Recopilador.)