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variar. Así te enamoré; así me quisiste; así te casaste conmigo. Doña Beatriz no sabía al cabo qué responder; se callaba, y dejaba ir a D. Braulio como le…

causado el pesar de darse por entendida con Beatriz de que sospechaba o sabía lo que, a su ver, pasaba. Doña Beatriz, por consiguiente, podía imaginar o imaginaba…

ocho, aún parecía el valle cubierto del manto vaporoso, y cuando Ándara y Beatriz salieron de sus gazaperas, alabaron a Dios por aquel bendito socorro enviado…

Gil y CarrascoCapítulo VIII Los días que siguieron al encierro de doña Beatriz fueron, efectivamente, para el señor de Bembibre todo lo penosos y desabridos…

animaba con el ejemplo de su serena actitud, y aun con joviales palabras, Beatriz sintió que en su alma se encendía súbitamente como una hoguera de cariño…

hecho inesperado, de absoluta insignificancia en la vida total, mas para Beatriz de una gravedad extrema, uno de esos hechos que en la vida individual equivalen…

de Carracedo para destruir los planes de felicidad de don Álvaro y doña Beatriz, por quien suponemos que no habrá dejado de interesarse un poco su buen…

elegante. Doña Beatriz presentó a su marido a la Condesa, y la Condesa presentó a los caballeros que formaban el corro, primero a doña Beatriz y después a…

de los enfermos, y con la suciedad y miseria que les rodeaba, Ándara y Beatriz no podían hacerse, no, no podían, infelices mujeres, a una ocupación que…

siglo. La risa y el buen humor con que doña Beatriz decía todo esto, desconcertaron un poco a Inesita. No sabía si echarlo también a broma o replicar seriamente…

CarrascoCapítulo XVIII Por tan extraños caminos el alma generosa y esforzada de doña Beatriz vino a sucumbir bajo el peso de su misma abnegación y a sacrificar el corto…

listoPasarse de listoJuan ValeraCapítulo XVII A pesar de su culto a doña Beatriz, el Condesito seguía yendo a teatros, paseos y reuniones aristocráticas…

Gil y CarrascoCapítulo XXXIII Mientras esto pasaba en Salamanca, doña Beatriz, pendiente entre la esperanza y el temor, veía correr uno y otro día fijos…

ilícita correspondencia. Por otra parte, si daba libertad a doña Beatriz, ésta, que sólo sabía de su lamentable historia lo que él había querido que supiese…

las prudentes reflexiones de D. Braulio a su mujer habían sido inútiles. Beatriz gustaba de brillar en sociedad, y ante esta consideración daba poca importancia…

enfermo; trajéronle un plato de latón con rancho, que no quiso probar. A Beatriz la hicieron salir por la sencilla razón de que no era presa, y naturalmente…

su esposa, y por otra parte, no era decoroso ni prudente dejar a doña Beatriz expuesta a los azares y contratiempos de una guerra que con tales visos…

Tolosa En la ciudad de Jaén huvo una comadre, moça y muy hermosa, llamada Beatriz, a cuya hermosura hizo grandes ventajas una sola hija que tenía, a quien…