Diferencia entre revisiones de «Almagesto: Libro VI - Capítulo 01»

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El próximo tema que tenemos que tratar concierne las [https://es.wikipedia.org/wiki/Sizigia '''sizigias'''] del Sol y de la Luna en las que los eclipses ocurren. El primer tópico de esto, a su vez, es la determinación de las conjunciones verdaderas y oposiciones. Ahora necesitamos incluso pensar que los movimientos periódicos y anomalísticos que [ya] hemos establecido para cada una de las luminarias son suficientes para la primera determinación de arriba [descrita]; estos [movimientos] permiten a uno, si él no reduce desde [el trabajo de] comparar las posiciones individuales de las luminarias en cada ocasión apropiada <ref name="Referencia 002"></ref>, para calcular los lugares y tiempos de las sizigias resultantes, tanto los que toman con respecto a los movimientos medios y las sizigias verdaderas, [por ej.] tomando en cuenta la anomalía. No obstante, en orden de proveer también un camino más conveniente para encontrar esas [sizigias], habiendo establecido una forma fácilmente disponible los horarios y lugares de las conjunciones y oposiciones medias, juntamente con la posición de la Luna en anomalía y en latitud en [esos] tiempos medios (que son las bases para la corrección derivando las sizigias verdaderas y de allí hacia las sizigias de la eclíptica), construimos las tablas para este propósito. Su estructura es la siguiente.
El próximo tema que hemos de tratar concierne las [https://es.wikipedia.org/wiki/Sizigia '''sizigias'''] del Sol y de la Luna en las que ocurren los eclipses. A su vez, el primer tópico sobre ello es la determinación de las conjunciones y oposiciones verdaderas. Ahora, necesitamos pensar incluso que los movimientos periódicos y anomalísticos que [ya] hemos establecido para cada una de las luminarias, son suficientes para la primera determinación arriba [descrita]; estos [movimientos le] permiten a uno, si éste no reduce el [trabajo de] comparar las posiciones individuales de las luminarias en cada ocasión apropiada <ref name="Referencia 002"></ref>, calcular los lugares y tiempos de las sizigias resultantes, ambas aquellas tomadas con respecto a los movimientos medios y a las sizigias verdaderas, [por ej.] tomando en cuenta la anomalía. No obstante, en orden de proveer también un camino más conveniente de encontrar tales [sizigias], teniendo establecido en una forma fácilmente disponible los horarios y los lugares de las conjunciones y oposiciones medias, juntamente con la posición de la Luna en anomalía y en latitud en [esos] tiempos medios (que son la base para la corrección que conducen a las sizigias verdaderas y desde allí a las sizigias de la eclíptica), construimos las tablas para este propósito. Su estructura es la siguiente.


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<ref name="Referencia 001">Sobre los capítulos 1 y 2 ver HAMA 118-21, Pedersen 220-2.</ref>
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Revisión del 00:33 14 sep 2015

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{Sobre las Conjunciones y Oposiciones del Sol y de la Luna}

[1]

El próximo tema que hemos de tratar concierne las sizigias del Sol y de la Luna en las que ocurren los eclipses. A su vez, el primer tópico sobre ello es la determinación de las conjunciones y oposiciones verdaderas. Ahora, necesitamos pensar incluso que los movimientos periódicos y anomalísticos que [ya] hemos establecido para cada una de las luminarias, son suficientes para la primera determinación arriba [descrita]; estos [movimientos le] permiten a uno, si éste no reduce el [trabajo de] comparar las posiciones individuales de las luminarias en cada ocasión apropiada [2], calcular los lugares y tiempos de las sizigias resultantes, ambas aquellas tomadas con respecto a los movimientos medios y a las sizigias verdaderas, [por ej.] tomando en cuenta la anomalía. No obstante, en orden de proveer también un camino más conveniente de encontrar tales [sizigias], teniendo establecido en una forma fácilmente disponible los horarios y los lugares de las conjunciones y oposiciones medias, juntamente con la posición de la Luna en anomalía y en latitud en [esos] tiempos medios (que son la base para la corrección que conducen a las sizigias verdaderas y desde allí a las sizigias de la eclíptica), construimos las tablas para este propósito. Su estructura es la siguiente.

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Notas de referencia

  1. Sobre los capítulos 1 y 2 ver HAMA 118-21, Pedersen 220-2.
  2. Por ej. en cada sizigia (mientras las tablas de Ptolomeo (Libro VI Capítulo 3) le permiten a uno, con mucho menos trabajo, elegir las sizigias en las que los eclipses son posibles).